Saca a Batet de la dirección y mantiene como portavoces a sus tres compañeros del PSC, mientras releva a Sumelzo y a Lastra, que se abstuvo
MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Gestora del PSOE ha decidido apartar de sus responsabilidades en el Grupo Socialista a los más próximos al ex secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, en una reorganización que ha ido más allá de los 'castigos' a quienes rompieron la disciplina de voto en la investidura de Mariano Rajoy. Así, ha sacado de la dirección en el Congreso a la catalana Meritxell Batet y la balear Sofía Hernanz, y en el Senado a María Luisa Carcedo, y ha quitado sus portavocías a la aragonesa Susana Sumelzo y a la asturiana Adriana Lastra, que se abstuvo. Mientras tanto, ha dejado sin cambios las mesas de las Comisiones y, de esta manera, la juez Margarita Robles seguirá presidiendo la de Justicia.
Así lo ha anunciado este jueves en rueda de prensa el portavoz de la Gestora, Mario Jiménez, quien nada más comenzar su intervención, después de una reunión de dos horas y media, ha subrayado que los cambios en la conformación de los nuevos equipos responden a criterios de "capacidad y confianza".
De esta manera, los ha enmarcado en una reorganización fruto del cambio en la dirección del partido y los ha desvinculado de la respuesta a los diputados del 'no'. De hecho, ha subrayado que corresponde al Grupo decidir la multa y ha explicado que la Gestora no se plantea por el momento abrir un expediente disciplinario que podría acabar incluso en suspensión de militancia a los seis del PSOE, una sanción que algunas federaciones defendían.
El 'número dos' de la Gestora ha detallado cómo quedan las direcciones en el Congreso y en el Senado. En la Cámara Baja siguen todos sus nombres a excepción de dos de las diputadas del 'no': Sofía Hernanz y Meritxel Batet, que ha sido la única diputada del PSC apartada de sus responsabilidades, después de que este miércoles también se decidiera retirar la propuesta de que José Zaragoza presidiera la Comisión Mixta para la Unión Europea. Ahora, se le propone como vicepresidente para la de Exteriores, aún sin constituir.
En el caso de Batet, su puesto queda "vacante" en espera de que se resuelva la crisis entre el PSOE y el PSC, porque en Ferraz están "seguros" de que ambos partidos van a "seguir trabajando juntos" y en el futuro los socialistas catalanes tendrán "opción a formar parte de la dirección del Grupo Socialista".
Además, siguen en sus portavocías los tres diputados del PSC que ostentaban estos cargos: Mercé Perea, en la comisión del Pacto de Toledo; Manuel Cruz, en la de Educación, y Joan Ruiz, en la de Políticas Integrales para la Discapacidad.
Sí se cubre el puesto que deja libre la diputada balear, cuyo compañero de circunscripción Pere Joan Pons también fue retirado como portavoz de la Comisión Mixta para la Unión Europea. En lugar de Sofía Hernanz, entra en la dirección el abulense Pedro Muñoz. Y continúa como portavoz adjunto José Luis Ábalos, también afín a Pedro Sánchez.
En el Senado se cambia a la asturiana María Luisa Carcedo, que formaba parte de la Ejecutiva del ex secretario general, y entran Begoña Nasarre (Huesca) y Rosa Aldea (Palencia). Y se promueve a la albaceteña Matilde Valentín como nueva 'número dos' del grupo, en sustitución de la asturiana.
Jiménez ha explicado que la dirección ha distinguido entre el trabajo del grupo y "la estructura institucional" que, a su juicio, "tiene que quedar al margen de los cambios del partido". De esta manera ha explicado que los cambios afectan a los portavoces pero no a los representantes del PSOE en las mesas de las comisiones. Así, la magistrada en excedencia Margarita Robles continuará ocupando la presidencia de la Comisión de Justicia.
Preguntado por si en esta decisión ha pesado la 'bronca' por la propuesta del PP de que ocupara la Presidencia de Exteriores el exministro Jorge Fernández Díaz, y el temor de que una ruptura del pacto entre partidos les hiciera perder puestos, Jiménez ha concedido que "ayer se vio una situación muy complicada" y los socialistas creen que ése "no es el camino". Eso sí, ha hecho hincapié en que su objetivo es "intentar preservar los ámbitos institucionales" de las "vicisitudes" del partido.
SUMELZO, CANTERA Y DE FRUTOS, APARTADAS
En relación a las portavocías, mientras se decide 'salvar' a los tres diputados del PSC, la Gestora ha procedido a quitar a la aragonesa Susana Sumelzo, que votó 'no' a Rajoy, la portavocía de la Comisión de Cooperación Internacional para el Desarrollo. Según han indicado fuentes socialistas, se la ha situado en una portavocía adjunta.
Además, se ha relevado a otras dos diputadas del 'no', que eran portavoces adjuntas. Así, la gallega Rocío de Frutos dejará de ser portavoz adjunta en la Comisión de Empleo y la independiente Zaida Cantera, comandante en situación de retiro, en Defensa.
Y, como ha ocurrido en el caso de la reorganización de las direcciones, los cambios han ido más allá de los diputados del 'no': la asturiana Adriana Lastra dejará de ser portavoz de Administraciones Públicas, materia de la que era responsable en la Ejecutiva de Pedro Sánchez y que pasa a ocupar la andaluza María Jesús Serrano, miembro de la Gestora. A partir de ahora, Lastra será portavoz adjunta en Defensa, ocupando el puesto de Cantera.
Mientras tanto, la murciana María González Veracruz, que como Lastra votó abstención "por imperativo", podrá seguir en su puesto de portavoz de Innovación, dentro de la Comisión de Economía y Competitividad.
LA GESTORA NIEGA DOBLE VARA DE MEDIR
Anunciados los cambios, Jiménez ha querido desvincularlos de la votación de investidura y ha defendido que no se han tomado "con carácter personal", sino con carácter "político", basándose en la "confianza" entre la dirección y los equipos de trabajo.
Y, al margen de esto, ha dicho, está el criterio que se ha seguido en el caso del PSC, que está en una situación diferente porque es otro partido con el que se está empezando un periodo de revisión de las relaciones que esperan que vaya por buen camino. A ello se debe, ha dicho, esa actitud "de buena voluntad".
A partir de aquí, no ha querido entrar en si ha habido doble vara de medir entre los diputados y, cuando se le ha preguntado por el caso de Sumelzo, en comparación con los diputados catalanes, ha recalcado que "cuando uno toma una decisión, tiene que hacerse responsable" de su postura y de las "consecuencias" que puede tener.
Y la dirección, ha remachado, puede tomar sus decisiones, que son de carácter político. "No somos un tribunal que está juzgando a nadie, somos una organización política que toma las decisiones conforme a criterios políticos y lo hace pensando en lo que puede ser mejor para el conjunto del proyecto", ha remachado.
Dicho esto, se ha desmarcado del resultado del procedimiento abierto por el Grupo Socialista, que previsiblemente acabará en la sanción máxima prevista, de 600 euros, a los diputados del 'no', porque, ha dicho, corresponde a la dirección en el Congreso, aunque el portavoz, Antonio Hernando, esta semana se había remitido a Ferraz.
Mientras tanto, ha asegurado que en estos momentos no está encima de la mesa la posibilidad de abrir un expediente informativo en la dirección del PSOE a los seis diputados socialistas que rompieron la disciplina y que, según los estatutos del partido, podría acabar en su suspensión de militancia, un castigo cuya dureza reclamaban algunos.
Al margen de esto, la dirección ha aprobado también la composición de la comisión que evaluará la relación entre el PSOE y el PSC. Por parte de Ferraz, estarán la eurodiputada Elena Valenciano, el extremeño Francisco Fuentes y el propio Mario Jiménez, mientras que en representación de los socialistas catalanes la integrarán Meritxell Batet, el nuevo 'número dos' del partido, Salvador Illa, y el alcalde de Cornellá, Antonio Balmón.