Arranca el sábado intentando "desmontar las mentiras" de CiU con una ofensiva que siembre dudas el discurso del expolio del nacionalismo
MADRID, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, va a presentar al PP en Cataluña como la "certidumbre" y la "seguridad" que conlleva la legalidad y la normalidad frente a la "incertidumbre" que supondría emprender el camino de la independencia sobre todo en el ámbito económico, según informaron a Europa Press fuentes populares.
El jefe del Ejecutivo tiene previsto volcarse en la campaña catalana en la medida en que su agenda se lo permita y su intención es viajar, al menos tres o cuatro veces hasta que se celebren las elecciones catalanas el próximo 25 de noviembre, contando con su intervención el próximo sábado en la reunión intermunicipal del PP que se celebrará en Barcelona.
Según las fuentes consultadas por Europa Press, en este foro tiene previsto comenzar la ofensiva para "desmontar las mentiras" que ha vendido el nacionalismo a la sociedad catalana y que, en buena medida, se han instalado en la sociedad.
Entre ellas, aseguran las fuentes consultadas, estaría esa idea de que España roba a Cataluña o de que no habría ningún problema para que, en una hipotética situación de independencia, Cataluña pasara a formar parte de la Unión Europea y mantuviera el euro como moneda, o que puede pagar las pensiones al margen de España.
De hecho, la intención de los populares es tratar de desmantelar, durante la campaña y después de ésta, todas estas ideas transmitidas por los nacionalistas catalanes y que han ido calando en la sociedad. El objetivo es sembrar dudas entre los ciudadanos que han creído ese mensaje.
NO HARÁN CAMPAÑA FRONTAL, SINO MODERADA Y SIN PROVOCACIONES
Pero el PP, convencido de que defender España y Cataluña es "compatible", no quiere realizar una campaña frontal, sino realizar un discurso "inteligente" y "moderado", sin entrar en "provocaciones" que es lo que, aseguran las fuentes consultadas, les viene bien a los nacionalistas.
Además, otro de los mensajes que reiterarán los populares será para instar a Artur Mas a que lo que pida lo haga donde debe hacerlo y por la vía legal. De hecho, así se lo ha hecho saber hoy mismo Mariano Rajoy durante su intervención en el pleno del Senado, al asegurar que su Gobierno no le puede dar autorización para un referéndum, como le había planteado la senador de CiU Montserrat Candini, sino que esa prerrogativa corresponde a las Cortes Generales.
Los populares catalanes van a intentar conseguir en esta campaña el apoyo que registraron en las últimas generales y que ascendió a 700.000 votos, frente a los 400.000 de las autonómicas. Se volcarán en que ese voto que, en las autonómicas se pasa a CiU, y que en las generales vota al PP. Ahora, les pedirán que en las elecciones catalanas confíen en el PP para "parar" a Artur Mas.
DOS FASES
No obstante, y según las fuentes consultadas, la estrategia de los populares se desarrollará en dos fases y no acabará el día de las elecciones, conscientes de que es muy difícil desmontar en 30 días una "falacia" que se ha ido gestando a lo largo de treinta años.
Por ello, la actuación del PP tendrá una primera fase hasta el día de las elecciones, pero continuarán con una segunda fase a partir del día siguiente a que éstas se celebren.