Foto: EUROPA PRESS
TORREJÓN DE ARDOZ (MADRID), 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Rey Don Juan Carlos ha pilotado durante unos 20 minutos un prototipo del avión A400M que fabrica Airbus Military para un grupo de ocho países, entre los que está España, en el que ha sido el primer vuelo de un jefe de Estado a bordo de este aparato, que llegará a España en 2015.
El monarca ha conocido de cerca el avión de transporte de cuyo ensamblaje final se encarga la fábrica de Airbus Military en Sevilla durante un vuelo de unos 40 minutos de duración, en el que ha estado acompañado del jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, general José Jiménez, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Manuel Sorial, y los presidentes de EADS, Tom Enders, y de la filial del consorcio europeo encargada de la fabricación de aviones militares, Domingo Ureña.
Durante el vuelo, el aparato ha alcanzado una velocidad máxima de 300 nudos (algo más de 500 kilómetros por hora), a una altitud de alrededor de 10.000 pies, y ha realizado una serie de maniobras, incluyendo virajes y un simulacro de lanzamiento de carga humanitaria. Ha partido desde Torrejón de Ardoz y se ha dirigido hacia Castilla-La Mancha, sobrevolando una zona situada entre Cuenca y Albacete.
Una vez de vuelta en la base aérea, el responsable de vuelos de prueba de Airbus Military, Fernando Alonso, ha explicado que Don Juan Carlos "ha querido volar el avión" y, ocupando el puesto de copiloto, ha tomado el mando durante la mitad del vuelo, mostrándose "muy a gusto".
Alonso ha explicado que durante el vuelo el monarca se ha mostrado muy interesado y ha formulado muchas preguntas sobre cómo van los ensayos del avión y sobre las capacidades del mismo.
PILOTAJE "IMPECABLE" DEL REY
El comandante Ignacio Alonso, piloto encargado del despegue y aterrizaje del aparato, ha asegurado que el Rey "se ha adaptado de forma muy rápida a los mandos del avión" y los ha llevado "de forma impecable". Además, se ha mostrado "encantado" con las capacidades del A400M.
De hecho, según ha explicado Alonso, Don Juan Carlos ha "animado" al consorcio europeo a que muestre y venda el aparato, del que ya hay encargados 174, fuera de Europa porque es "un gran avión".
En declaraciones a Europa Press, Ureña se ha mostrado "extremadamente orgulloso" de que el Rey haya sido el primer jefe de Estado en probar el A400M en vuelo y ha recalcado que "ha sido fantástico" que lo haya pilotado.
"SIEMPRE QUE PUEDA AYUDAR, NOS AYUDARÁ"
Además, ha destacado que el monarca ha apoyado "siempre" a la compañía y se ha mostrado convencido de que también les "va a ayudar en la campaña de exportación" que comenzará este año. "Es nuestro mejor embajador", ha remachado, convencido de que "siempre que pueda ayudar", lo hará.
El presidente de Airbus Military ha explicado que este mismo año la compañía va a "empezar a enseñar el avión por todo el mundo" y a demostrar "lo que es capaz de hacer".
El primer A400M que será entregado a un cliente llegará a Francia a finales de este año. Ya se encuentra en la factoría que tiene Airbus Military en Sevilla y que se encarga del ensamblaje final del aparato. Está previsto que la Fuerza Aérea Española reciba 27 de estos aviones de transporte concebidos principalmente para el traslado de militares y ayuda humanitaria y que sustituirán a los tradicionales Hércules.
Para la compañía, una de las características principales de este aparato es que es el avión de transporte "más versátil disponible en la actualidad", lo que permite que dé respuesta "a las necesidades más variadas de las Fuerzas Armadas de todo el mundo".
En concreto, puede desarrollar misiones tácticas a corta distancia directamente sobre el lugar de la acción, así como misiones estratégicas o logísticas a larga distancia. Además, es apto para ser utilizado como avión de reabastecimiento.
Está impulsado por cuatro motores turbopropulsados contrarrotatorios --los dos interiores giran hacia el interior, y los exteriores, hacia el exterior-- y es capaz de aterrizar en campos de arena o tierra. Además, cuenta con medidas de autoprotección para su uso en teatro de operaciones.
Sus ocho clientes son, además de España, Bélgica, Francia, Alemania, Luxemburgo, Malasia, Turquía y Reino Unido. Además, se espera comercializar una versión básica del aparato a otros países, aunque desde Airbus Military se asegura que la carga de trabajo actual implica que no se podría comenzar a producir aparatos para otros clientes hasta dentro de cuatro o cinco años.