Los delegados avalan su gestión durante los últimos cuatro años con un solo voto en contra y 21 abstenciones
MADRID, 1 Nov. (EUROPA PRESS) -
La líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, ha defendido este viernes las posibilidades de la formación para convertirse en alternativa política y acabar con el bipartidismo en España, todo ello mediante el trabajo en las instituciones para "dignificar la política y regenerar la democracia".
"Somos un partido de gobierno. Hemos de salir de este Congreso preparados para gobernar España", ha dicho Rosa Díez a los delegados que han asistido al II Congreso Nacional que el partido celebra durante los tres primeros días de noviembre en Madrid.
Rosa Díez se ha dirigido al auditorio para presentar el informe de gestión de la dirección de UPyD durante los últimos cuatro años, ya segura de que volverá a liderar la formación durante el próximo periodo dado que no se han presentado candidaturas alternativas para hacerle frente.
Los amplia mayoría de los delegados han avalado con sus votos el trabajo de la dirección de UPyD. En concreto, 400 delegados han votado a favor del informe de gestión, 21 se han abstenido y tan sólo uno ha votado en contra.
En su presentación, Rosa Díez ha recordado la trayectoria de UPyD desde su nacimiento en 2007, "sin ningún otro interés que ser un buen instrumento para servir a los ciudadanos", y ha garantizado que su objetivo sigue siendo el mismo que entonces: "dar una alternativa a los ciudadanos para que pudieran reconciliarse con la política, reencontrarse con la democracia y elegir".
Así, ha repasado los logros obtenidos en las últimas citas electorales, su trabajo parlamentario e institucional, las cifras de afiliación y la memoria económica, momento en el que ha presumido de tener unas cuentas saneadas en un momento en el que "eso tampoco es normal".
CRÍTICAS A LA ESCASA AFILIACIÓN
Rosa Díez ha asegurado que UPyD desarrolla todo este trabajo sin olvidar que "los jefes" son los ciudadanos. "Somos sinceros, rigurosos y cumplidores Hacemos política para que cambien las cosas, nunca hacemos nada ni para obtener ni para mantener el poder", ha presumido.
En este punto, ha insistido en que la 'formación magenta' apoya o rechaza siempre ideas, "no siglas", y ha hecho alusión a importantes reformas legislativas en marcha como la ley de educación o la reforma local.
Un total de 18 militantes han tomado la palabra, la mayoría de ellos para apoyar la gestión de la dirección. Las escasas críticas han estado centradas en aspectos internos como el número de afiliados, cuya progresión algunos militantes ven muy escasa.
UPyD contaba con 5.974 afiliados en septiembre de 2009 y 6.165 el mismo mes de este año, 191 más. "La tropa es muy escasa, tenemos muchos jefes y pocos indios", ha lamentado uno de los delegados que ha intervenido.
Rosa Díez ha defendido que UPyD presenta estas cifras porque expulsa a sus militantes cuando llevan seis meses sin pagar, al contrario que otras formaciones que dicen tener un millón de afiliados "que no pagan".
Pero además, ha sostenido la necesidad de "proteger al partido de quien sólo quiere un cargo". "Llega mucha gente diciendo que quiere ser alcalde y trae a cien de su pueblo. Una vez vino uno que me dijo que traía el cinturón sur de Madrid y mil afiliados, y le dijimos no", ha expuesto.
Rosa Díez cree que "no es de extrañar" que a un partido joven le cueste sumar afiliados. "Quizá si no fuéramos tan claros en algunas cosas tendríamos más afiliados", ha dicho después de insistir en la necesidad de que UPyD no pierda su esencia.
SAVATER, A FAVOR DE PACTOS CON "SEMEJANTES"
En la apertura del Congreso también ha participado el filósofo Fernando Savater, quien cree que UPyD debe "buscar apoyos en partidos semejantes" y ha señalado directamente a Cataluña, donde el partido no cuenta con representación y su espacio político está ocupado por Ciudadanos.
"La unión hace la fuerza y hoy llega el momento de unir. No debemos rehuir con grupos compartidos que comparten ideas. Es la hora de que UPyD dé un gran salto hacia delante", ha pedido.