MADRID 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
La subcomisión del Congreso encargada de estudiar las posibles reformas de la Ley Electoral prevé celebrar la próxima semana su primera reunión sin que los partidos políticos hayan encontrado un orden de prioridades coincidente.
El presidente de la Comisión Constitucional del Congreso, Alfonso Guerra, que también lo será de la subcomisión, ha ido sondeando a los grupos parlamentarios con idea de celebrar esa reunión constitutiva el próximo 2 de octubre, se informó a Europa Press en fuentes parlamentarias. A esa cita, donde debería definirse una primera agenda de trabajo, los partidos políticos llegarán con prioridades muy distintas.
El PP y el BNG, que este verano obligaron al PSOE a agilizar los trámites para crear la subcomisión, tienen como primer objetivo introducir las reformas necesarias que permitan que los emigrantes inscritos en el Censo de Residentes Ausentes (CERA) puedan votar en urna en los consulados, tal y como se recoge en el vigente Estatuto de los Ciudadanos en el Exterior y siguiendo la proposición de ley que se aprobó por unanimidad en el Parlamento gallego. Todo ello con el propósito de que la reforma pueda aplicarse en las elecciones gallegas de primavera.
EL VOTO INMIGRANTE, PRIORIDAD DEL PSOE
Sin embargo, el PSOE se descolgó hace una semana avisando de que su primera prioridad será favorecer el voto de los inmigrantes en las elecciones municipales, para lo cual propondrá una reinterpretación del requisito de reciprocidad que exige la Constitución. Ese anuncio ya provocó las protestas del PP y de los nacionalistas gallegos.
Por su parte, los nacionalistas de CiU ya han advertido de que su primera pretensión es reformar el sistema electoral para el Parlamento Europeo de tal manera que los eurodiputados se puedan elegir por comunidades y no en la vigente circunscripción estatal. Su deseo sería aplicar esta reforma en los comicios europeos de junio de 2009, pero el PSOE y el PP ya han rechazado esta semana la propuesta en el Pleno del Congreso.
Mientras tanto, Izquierda Unida (IU) y Unión, Progreso y Democracia (UPyD), las dos formaciones más interesadas en una amplia reforma de la Ley Electoral, quieren hacer hincapié en la proporcionalidad del sistema. Por cauces distintos, ambos pretenden ampliar a 400 el número de diputados para que las formaciones de implantación estatal no mayoritarias puedan aprovechar los votos que no les permiten acceder a escaño.