MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, ha defendido que el derecho de manifestación está protegido en la Constitución pero ha precisado que ello no significa "otorgar carta de naturaleza" a la explotación de un legítimo malestar social como un medio para "deslegitimar en bloque" la forma de Estado, las Cámaras legislativas o a los propios parlamentarios, con un "frecuente gravísimo quebranto de la convivencia democrática".
En los desayunos informativos de Europa Press, el máximo representante del Ministerio Público ha destacado que su departamento confiere una especial sensibilidad a la protección del derecho de manifestación y al de libertad expresión.
Sin embargo, Torres-Dulce ha advertido de las "imposibles consecuencias" de la utilización del descontento social como una forma de "deslegitimación en bloque de la forma de Estado, las Cámaras o sus titulares.".
Además, ha calificado la Constitución como un marco "ejemplar" de convivencia. Aunque en ocasiones ha podido defraudar las "altas expectativas" puestas en ella, ha subrayado que la solución de los problemas estructurales debe venir por el camino del diálogo y el análisis conjunto pero no por la "senda de la confrontación y la airada demolición del edificio constitucional".