Inaugura hoy el III Encuentro 'Mujeres por un mundo mejor' que pretende concienciar y denunciar la discriminación
MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó hoy, sobre la fotografía en la que posó con un empresario nigerino y sus tres esposas, que fue una situación "creada de forma natural y protocolaria" que puede suceder encuentros de esta naturaleza, pero reiteró que esa imagen es la "manifestación de un drama que hay que combatir". "Ni desde el punto de vista legal, ni cultural, ni de las convicciones personales, puedo compartir ni justificar este tipo de situación", sentenció.
De la Vega indicó que el episodio de la fotografía puede tener una vertiente positiva si sirve para "llamar la atención sobre algo que hay que erradicar" y que "desgraciadamente está muy extendido", al tiempo que mantuvo su "rechazo total" a la poligamia desde el punto de vista personal.
En una entrevista con TVE recogida por Europa Press, la vicepresidenta explicó desde Níger, donde hoy inaugura el III Encuentro de la Red de Mujeres por un Mundo Mejor, que esta cita, que durante dos días congregará a más de 40 países africanos, tiene como objetivo "poner en común las situaciones de discriminación que todavía" padecen muchas mujeres y que les afecta a "su vida personal, a su libertad y a su falta de capacidad y autonomía para dirigir sus destinos".
"Las mujeres españolas estamos aquí para compartir, escuchar, trabajar, aprender y adoptar medidas que nos permitan construir ese mundo mejor, que yo creo que es posible", señaló.
Para poder avanzar y mejorar las condiciones de vida de las mujeres africanas, prosiguió, "queda mucho camino por recorrer", en el que hay que "concienciar a todos los Gobiernos sobre la necesidad de erradicar la discriminación". De todos modos, la vicepresidenta subrayó el carácter "comprometido y luchador" de las mujeres africanas, quienes "luchan en la gestión de los recursos, de la paz, del medio ambiente, y ahora de la crisis alimentaria".
Así, explicó que las tres iniciativas de este tipo que ha promovido el Gobierno, --las anteriores fueron en Maputo y Madrid-- pretenden ayudar a la "eliminación de los obstáculos que existen para la igualdad" y trabajar para visibilizar una problemática "dura y muy grave", que impide a las mujeres "ejercer sus derechos básicos y fundamentales". La causa se debe, según indicó, a una "situación de dominación", que calificó de "intolerable".
"En estos tres años se ha avanzado en muchos temas, se ha puesto en marcha proyectos de cooperación y desarrollo para las mujeres, se ha hecho un diagnóstico sobre el acceso de las niñas a la educación, sobre sus dificultades para tener una salud garantizada, y vamos a seguir trabajando, uniendo todas nuestras fuerzas", agregó.
INMIGRACIÓN
Preguntada sobre la política de la Unión Europea que prevé endurecer el control sobre la inmigración irregular, De la Vega respondió que África mantiene una "posición bastante compartida" con el Gobierno de España, que, dijo, "promueve una inmigración legal y ordenada".
"Trabajamos con los países africanos para crear condiciones para que la gente tenga vida y esperanza en su tierra", pero que cuando "de manera libre" opta por salir a otros continentes, lo haga en "condiciones de legalidad y no de explotación", señaló. "Hay que ofrecer a los ciudadanos africanos instrumentos para poder elegir", apostilló.
A este respecto, recalcó que España, que "es un país muy solidario", ha pasado en los últimos años de invertir en cooperación en desarrollo, en concreto en el áfrica subsahariana, "ciento y pocos millones en 2005, a mil millones en 2008" que, según anunció, permitirán desarrollar proyectos en todos los ámbitos para aliviar las condiciones de vida" de los ciudadanos del continente africano.