PAMPLONA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Casa Consistorial de Pamplona ha acogido este miércoles una reunión entre representantes y técnicos municipales y profesionales de la hostelería y del comercio, vecinos y asociaciones para trabajar el nuevo proyecto que regulará el funcionamiento del sector hostelero en el Casco Antiguo.
En la reunión han participado el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, el concejal delegado de Ciudad Habitable y Vivienda, Joxe Abaurrea, el concejal delegado de Seguridad Ciudadana y Convivencia, Aritz Romeo, el director del Área de Urbanismo y Vivienda, Vicente Taberna, miembros de las asociaciones de vecinos Alde Zaharra, Convivir en lo Viejo y Sobrevivir en lo Viejo, y representantes de la Asociación de Comercio, Hostelería y Servicios del Casco Antiguo de Pamplona, la Asociación de Empresarios de Hostelería de Navarra (AEHN) y la Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelería (ANAPEH).
Este proyecto incluye aspectos para los nuevos establecimientos que regularían las distancias que deben respetar respecto a los ya existentes o aspectos constructivos como características especiales, dimensiones y aforos.
El documento también recoge medidas que deberían adoptar los establecimientos que ya están en funcionamiento como limitadores para controlar el volumen de la música, la colocación de placas exteriores que informen sobre el tipo de licencia que tiene el establecimiento, aforo y horarios de apertura; que durante el horario nocturno no se podrá utilizar como zona de estancia el acceso, las terrazas o los patios de los establecimientos; y que los toldos deberán quedar plegados en horario nocturno.
Con estas medidas el Consistorio quiere que los establecimientos respeten los horarios para los que tienen licencia de apertura, no se concentren en unas pocas calles y se trasladen a zonas menos saturadas y se limite el volumen de música a menos de 70dba cuando no haya un departamento estanco de acceso al local.
De esta forma se pretende reducir ruidos, suciedad y molestias para mejorar la convivencia entre viviendas, comercio y hostelería en una zona incardinada en el conjunto histórico artístico de la ciudad y que se convierte en polo de atracción para el ocio y el turismo por sus valores patrimoniales.
Así continúa el proceso que inició el Consistorio en agosto del año pasado cuando suspendió por un plazo máximo de un año la tramitación de licencias de obra y actividad clasificada de nuevas actividades de cafetería, restaurante y sociedad gastronómica en el Casco Antiguo.
ESPACIOS QUE PODRÍAN OBTENER LICENCIAS
El proyecto recoge siete grupos de hostelería y o actividades aledañas. Las cuatro primeras son las que, de acuerdo a la normativa actual que se mantendría en este aspecto, podrían tener nuevas licencias: comercios de alimentos calientes, manipulados y/o elaborados sin consumo en el local; degustaciones de café; sociedades gastronómicas, peñas y similares; y cafeterías o restaurantes. Respecto a la legislación actual, se fijaría un tamaño máximo para cafeterías y restaurantes (se proponen 300m2 para cafeterías y 450m2 para restaurantes) y se limitaría la posibilidad de apertura en función de las distancias con los locales ya existentes.
Para ello se crean dos zonas diferenciadas: la primera, denominada Límite Sur y que comprende las calles Juan de Labrit, paseo de Sarasate, Plaza del Castillo, calle Ciudadela, calle Taconera y plaza de Recoletas, tendría una limitación de 25 metros entre locales, mientras en la otra, denominada Límite Norte y Estructura Interior del Casco Antiguo (comprende el resto de calles), la distancia que se propone son 50 metros.
Otros detalles constructivos que se requerirían serían que las puertas tengan amortiguación de cierre, que no se coloquen dos contiguas o que cuando los locales tengan música no podrán contar con ventanas a la calle. También se especifica que el cierre del local deberá realizarse en la línea de fachada del edificio. Asimismo, se valora la opción de regular los horarios de los comercios de alimentación también en la franja nocturna.
Los otros tres grupos que se definen en el proyecto son bares; bares especiales y cafés espectáculos; y discotecas y salas de fiestas, establecimientos para los que se continuaría sin dar nuevas licencias de apertura, como se estipuló en la reforma del PEPRI fechada en 2006.