Además de un delito de daños, la Policía Foral le ha imputado también otros de tráfico de drogas, desobediencia y atentado a la autoridad
PAMPLONA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Policía Foral ha detenido a un vecino de la Zona Media tras romper los cristales, valorados en unos 800 euros, de la marquesina de la parada de autobús de la localidad de Tiebas (Tiebas-Muruarte de Reta).
Además de un delito de daños, los agentes han imputado a esta persona, que responde a las iniciales A.L.R. y tiene 25 años, tres delitos más por tráfico de drogas, desobediencia a agentes y atentado contra la autoridad.
Los hechos ocurrieron el pasado 4 de octubre, cuando la Policía Foral recibió un aviso según el cual un varón había roto los cristales de la marquesina de la parada del transporte interurbano en Tiebas. En la alerta se detallaba, además, que esta persona se había subido a un autobús cuyo destino final era Pamplona.
Después de realizar las consiguientes averiguaciones y conocer la cuantía de los daños ocasionados, la Policía Foral detuvo a esta persona en la estación de autobuses de Pamplona. Asimismo, durante el registro del detenido, los agentes hallaron entre sus pertenencias 13 bolsitas de marihuana preparadas para su distribución, por lo que solicitaron una autorización judicial para entrar en su domicilio.
En este lugar la Policía Foral halló un armario secadero para plantas de marihuana con sistema de ventilación y control de temperatura, varias macetas con restos de tallos y hojas de la misma sustancia, diversas plantas tendidas para su secado, así como precintos y útiles para su cultivo. Ante estas evidencias, la Policía Foral le imputó también al detenido un delito contra la salud pública por tráfico de drogas, según ha informado el Gobierno foral en una nota.
Por otra parte, cuando esta persona estaba en las dependencias policiales provocó daños en una puerta y en un lavabo. Ante su estado de agitación y nerviosismo, los agentes trataron calmarle dialogando con él. Como no lo consiguieron procedieron a su inmovilización para evitar que se autolesionara, momento en el que insultó a los agentes y golpeó a uno de ellos. Por todo ello la Policía Foral le imputó además al detenido un delito de desobediencia, otro de atentado contra agente de la autoridad y una falta de daños.