PAMPLONA, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Navarra ha acordado la concesión de la Medalla de Oro de Navarra 2014, a título póstumo y conjuntamente, a los impulsores del Programa de Promoción Industrial (PPI) de Navarra de 1964, que propició la transformación económica y social de la Comunidad Foral.
Según se recuerda en el Decreto, desde su inicio, hace ahora cincuenta años, y hasta 1975, el PPI logró la creación o ampliación de 200 empresas, que generaron cerca de 20.000 nuevos empleos y una inversión de 12.000 millones de pesetas.
El impulso propiciado por este programa "constituye la base esencial para el desarrollo de Navarra y ha contribuido decisivamente a alcanzar el nivel de progreso y bienestar del que hoy disfrutamos", se indica en el Decreto, en el que se destaca cómo la implicación personal del vicepresidente Félix Huarte y el diputado Miguel Javier Urmeneta "constituyen un gran ejemplo y un modelo de visión, de iniciativa y de actuación".
El acuerdo contempla que serán los herederos de Huarte y Urmeneta los encargados de recoger el galardón el próximo 3 de diciembre, Día de Navarra.
EL PROGRAMA DE PROMOCIÓN INDUSTRIAL
El PPI fue aprobado por la Diputación Foral en 1964, tras la llegada de los dos nuevos diputados por Pamplona, Félix Huarte, que sería vicepresidente, y Miguel Javier Urmeneta. Ambos fueron los promotores de esta iniciativa para propiciar el despegue industrial de Navarra -que había quedado fuera de los polos de desarrollo diseñados por el Estado-, cómo única vía para mejorar las condiciones de vida de los navarros.
Los objetivos concretos de la iniciativa eran los siguientes: evitar la emigración de la población navarra, lograr una expansión industrial equilibrada en todo el territorio foral, aprovechar al máximo el uso de los recursos naturales de Navarra (potenciar la producción agrícola, ganadera y forestal), crear puestos de trabajo para mano de obra cualificada, técnicos y titulados navarros, movilizar el ahorro y recursos financieros autóctonos y atraer capitales foráneos.
El programa se sustentó en la capacidad foral de ofrecer subvenciones y exenciones fiscales a la creación o ampliación de empresas (los beneficios alcanzaban a proyectos a partir de un millón de pesetas de inversión y creación de 10 empleos). Estas ayudas se complementaron con un plan de inversiones públicas en materia de comunicaciones, polígonos industriales, formación profesional, etc.
Según los datos correspondientes al periodo 1964-75, se acogieron al PPI un total de 207 proyectos empresariales, que posibilitaron la creación de 19.167 puestos de trabajo. Las inversiones ascendieron a 12.022 millones de pesetas.
Por sectores, destacan las actividades metalúrgicas y, dentro de ellas, la construcción y reparación de maquinaria y material de transporte, así como el de alimentación y madera. Entre todos ellos, suman el 60% de las empresas incluidas en el programa.
En lo que se refiere al lugar de implantación, se crearon 14 polígonos industriales repartidos por todo el territorio foral. No obstante, destaca la importancia de Pamplona, que absorbió el 50,7% de las inversiones y el 37,6% del empleo generado, seguido de la Ribera (20,7% de inversión y y 25,1% de empleo), el resto de zonas presentan porcentajes similares cercanos al 10%, excepto la Montaña que posee índices inferiores.
Da cuenta de la buena acogida de la iniciativa, el hecho de que en 1965, al año siguiente a su implantación, solicitaron ayudas un total de 157 proyectos, de los que 80 correspondieron a nuevas empresas y 77 a ampliaciones de ya existentes.
FÉLIX HUARTE GOÑI
Nacido en Pamplona el 6 de noviembre de 1896, Félix Huarte Goñi falleció el 12 de abril de 1971. En enero de 1923 contrajo matrimonio con Adriana Beaumont Galdúroz, quien en diciembre de 1991 recibiría la Medalla de Oro de Navarra por sus trabajos a favor de la promoción social.
Félix Huarte realizó sus estudios primarios en las escuelas de San Francisco de Pamplona. A la edad de 14 años comenzó a trabajar en la oficina de estudios y proyectos de Ángel Galé Hualde. En 1915 ingresó como delineante en la Comandancia militar de Pamplona y un año más tarde pasó a la empresa constructora de Rufino Martinicorena, empresa que se encargó de la construcción de la plaza de toros de Pamplona.
En 1927, asociado con Emilio Malumbres y el industrial pamplonés Toribio López López, que aportó el capital inicial, constituyó la sociedad colectiva regular "Huarte y Malumbres", con el tiempo una de las más importantes constructoras del mercado nacional. De los beneficios generados por la constructora surgió el grupo industrial que agrupó a empresas como Imenasa, Inasa, Perfrisa, Torfinasa o Papelera Navarra, entre otras, cuyos consejos de administración presidió. En la década de los cincuenta y, en el marco Imenasa, impulsó el establecimiento de la escuela salesiana de capacitación profesional.
A principios de 1962 promovió y financió la formación de un equipo de asesores que estudió las posibilidades de desarrollo económico de la provincia. En octubre de 1963, retirado de la actividad profesional, presentó su candidatura al Ayuntamiento de Pamplona y el 2 de abril de 1964 tomó posesión de la vicepresidencia de la Diputación de Navarra, que como diputado decano le correspondía. Desde este cargo, impulsó el Programa de Promoción Industrial de Navarra.
Falleció en abril de 1971, pocos días después de abandonar su cargo como vicepresidente, y ese mismo mes fue nombrado a título póstumo Hijo Predilecto de Navarra. Recibió además, entre otras, la Medalla y Placa de Plata del Mérito Turístico, la Placa de Oro al Mérito Deportivo y la Encomienda de Alfonso X el Sabio
MIGUEL JAVIER URMENETA AJARNAUTE
Por su parte, Miguel Javier Urmeneta Ajarnaute (Pamplona 26 de noviembre de 1915- 12 de junio de 1988), se licenció en Derecho por la Universidad de Salamanca, aunque nunca llegó a ejercer de abogado.
Tras finalizar la guerra civil, continuó la carrera de militar, durante la que alcanzó el grado de Teniente Coronel del Estado Mayor. En 1954, abandonó el ejército para ocupar la dirección general de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad Municipal de Pamplona, cargo en ostentó hasta su jubilación en 1982. Durante su gestión, la Caja de Ahorros Municipal experimentó un notable crecimiento, pasando de 1 a 57 sucursales, y de 15.000 a 150.000 impositores y promovió el apoyo de la entidad a numerosas obras sociales y culturales.
Urmeneta compaginó su actividad profesional con la actividad política. En primer lugar, como alcalde Pamplona, entre 1958 y 1964. Entre sus logros más destacados, cabe mencionar la retirada de los cuarteles militares del centro a Aizoain y la cesión por parte del Ejército de la Ciudadela.
También fue el impulsor del nuevo sistema de abastecimiento de agua, con la construcción del embalse de Eugui y la renovación de la red de saneamiento y alcantarillado. Su gestión coincidió también con una importante expansión urbanística: plan sur, tercer ensanche, etc.
En 1964 dejó la alcaldía y fue elegido diputado foral por la Merindad de Pamplona. Junto con Félix Huarte, promovió el Programa de Promoción Industrial de Navarra. Permaneció en el cargo hasta 1971, etapa en la que también acometió otros proyectos como la mejora de la red viaria.
Tras su salida de la Diputación Foral, ostentó el cargo de concejal entre 1976 y 1978. En 1977 fue uno de los fundadores del partido Frente Navarro Independiente.