El médico ha obtenido la primera vacuna sintética química y la primera contra la malaria
PAMPLONA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El profesor colombiano Manuel Elkin Patarroyo ha sido reconocido con el Premio Internacional Príncipe de Viana de la Solidaridad 2011, un galardón que ha obtenido por su búsqueda de soluciones para las enfermedades que afectan principalmente a los habitantes de las zonas tropicales del planeta mediante la obtención de vacunas.
El premio, otorgado por el Gobierno de Navarra y Caja Laboral y dotado con 40.000 euros, será entregado por los Príncipes de Asturias y de Viana, Don Felipe de Borbón y Doña Letizia Ortiz, en un acto que se celebrará esta primavera en Pamplona.
El presidente del jurado, Miguel Induráin, ha dado a conocer este martes el fallo en una rueda de prensa en la que también ha comparecido la consejera de Asuntos Sociales, Familia, Juventud y Deporte del Ejecutivo foral, María Isabel García Malo, y el director regional de Navarra de Caja Laboral, Javier Cortajarena.
El objetivo del trabajo de Manuel Elkin Patarroyo, según ha destacado Induráin, es proteger con las vacunas a la más amplia cantidad de seres humanos, en particular a la población de los países subdesarrollados o en vías de desarrollo.
El médico ha conseguido la primera vacuna sintética química, la primera contra un parásito, y la primera contra la malaria, enfermedad sobre la que inició sus trabajos en 1980, alcanzando grandes logros, como la obtención de la vacuna sintética SPf66 contra esta enfermedad en 1987.
Los estudios clínicos adelantados en países como Colombia, Venezuela, Ecuador, Brasil y Tanzania mostraron que la vacuna protege entre un 30 y un 50 por ciento de la población mayor de cinco años, siendo mucho más efectiva en niños de entre uno y cinco años.
En la actualidad, el profesor continúa perfeccionando la vacuna. Así, en octubre del pasado año anunció que la nueva vacuna contra la malaria posee una capacidad protectora de entre el 90 y el 95 por ciento en los monos.
Además, el Instituto de Investigación dirigido por el científico lidera también la producción de vacunas contra otras enfermedades infecciosas, como la tuberculosis y la leishmaniasis. Su método de síntesis química permite que las vacunas puedan fabricarse en grandes cantidades, a precio reducido, y que sean estables a temperatura ambiente.
MÁS DE 46 AÑOS DE TRABAJO
La consejera García Malo ha destacado que el jurado ha valorado el trabajo del profesor durante varias décadas, así como "la necesidad de erradicar enfermedades tan importantes en países empobrecidos, como la malaria". Asimismo, ha resaltado su labor en concordancia con los Objetivos de Desarrollo del Milenio, como su lucha en favor de la salud infantil y materna, y contra el sida, la malaria y la tuberculosis.
Por otro lado, el jurado también ha querido reconocer la donación por parte del premiado a la Organización Mundial de la Salud las posibles patentes de sus avances médicos.
García Malo ha recordado que, según la Organización Mundial de la Salud, la mitad de la población mundial está en riesgo de contraer malaria, particularmente los países más pobres. En este momento, existen 243 millones de casos, el 85 por ciento de ellos en África.
Este premio ha alcanzado este año su segunda edición y sus finalistas han sido: Centro de Estudios y Promoción del Desarrollo (Desco) de Lima (Perú); Fundación Vicente Ferrer (Barcelona); Fundación Terre des hommes (Lausana, Suiza); Save the children (Madrid); Red de jóvenes afectados por la Guerra (Nypaw) de Amsterdam; Ministerio de Sanidad de Etiopía (Addis Abeba); Martha Pelloni, Fundación San Teresa (Goya Corrientes, Argentina); Manuel Elkin Patarroyo (Bogotá, Colombia); Lydia María Cacho (Benito Juárez Cancún, México); Voix Libres-La Terre des Enfants (Ginebra, Suiza).