Asegura que le sorprende el "desparpajo con el que gobiernan algunos que han quedado a distancia sideral del primero, como en Galicia"
MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, afirmó hoy que "sin duda alguna" el "cambio" en la Ley Electoral ha de ser una de las "prioridades básicas" para la próxima legislatura, por lo que adelantó que él lo planteará en el programa de Gobierno con el que se presente "a las próximas elecciones" generales.
Durante su presentación del líder del PP de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, en el Fórum Europa, indicó que a veces le "sorprende" el "desparpajo" con el que gobiernan "algunos que han quedado a distancia sideral del primero, como ocurre en el caso de la presidencia de la Xunta, y hablan en nombre del respeto a la voluntad de los ciudadanos".
En este sentido, recalcó que Feijóo ganó sus primeras elecciones como presidente del PP gallego -las municipales del 27 de mayo- con "claridad", puesto que, según dijo, el PP es la "primera fuerza política en Galicia con una diferencia de más de 10 puntos sobre el segundo -PSOE- y más de 20 sobre el tercero, el BNG".
"Ha ganado las elecciones pero la existencia de una Ley Electoral que está caduca, pasada de moda e interpreta de forma muy curiosa lo que es un sistema democrático, ha dado lugar a que en muchos lugares donde el PP es primera fuerza política, con una diferencia abismal, esté en este momento en la oposición", argumentó.
Asimismo, Rajoy aseguró que Feijóo es un "luchador que no tiene miedo a los cambios, un reformista convencido con visión de Estado", con capacidad para el diálogo y un trabajador "incansable, un político acreditado con referencias y garantía, alguien en quien se puede confiar".
GALICIA NECESITA "BUENOS GESTORES"
Por eso, señaló que a Galicia le hacen falta presidentes de este "corte", políticos que a la vez hayan demostrado que son "buenos gestores", gente que crea en sus posibilidades, que no se "enrede en debates identitarios y reme en favor del bienestar social y el progreso de todos los gallegos".
Según Rajoy, a Galicia le hace falta gente que "no se ocupe de en qué hay que hablar, sino de que es lo que hay que hacer y cómo se debe competir en un mundo tan global, tan abierto, tan difícil, pero que tantos retos y oportunidades proporciona".
Rajoy recordó que Feijóo preside el PP de Galicia desde el 15 de enero de 2006, cuando el 96 por ciento de los compromisarios lo eligieron para asumir el liderazgo del "partido más importante de Galicia, el que más apoyos ha recibido y el que más apoyo hoy sigue recibiendo por parte de los gallegos".
En esta línea, recordó que entonces "recogió el testigo que dejó" Manuel Fraga -también presente en este acto-, imprimiendo su "propia personalidad y su forma de entender la política". "Suceder a Fraga, como es perfectamente entendible, no es ciertamente una tarea fácil", subrayó.
"Pese a su juventud, tiene una larga trayectoria de servicio público. Ha pasado por diferentes puestos en la administración, y en todos ellos ha demostrado su eficacia, tanto como presidente del Insalud, gestor de Correos, consejero de Obras Públicas en Galicia y luego vicepresidente primero de la Xunta", recordó.
18 MESES LIDERANDO EL PP GALLEGO
Además, añadió que lleva ya 18 meses liderando el proyecto del PP en Galicia, tiempo durante el cual "ha sabido aglutinar las diferentes sensibilidades de un partido que hoy en día está unido, no deja margen a las fisuras y se confía en su capacidad para alcanzar nuevos éxitos electorales".
"A Galicia le falta gente que se ocupe de lo importante, del Plan Galicia, la mejor oportunidad que nunca se ha dado a una CCAA para transformar una horrible catástrofe en una gran oportunidad. Eso fue el Plan Galicia y eso fue lo que el Gobierno de Zapatero primero, y el de Touriño después, tiraron por la borda en algo menos de tres años", expuso.
A su juicio, se trata de gobernar, de hacer cosas en "beneficio" de la gente, "intentar aprovechar las oportunidades de la globalización", y no se trata de mirar al pasado, "crear problemas, generar líos identitarios y quedarse en ese pasado que algunos siempre intentaremos superar".
Para concluir, insistió en que Feijóo es un candidato "moderno, inteligente, capaz, que mira la futuro y que cree que la Edad Media debe estar donde siempre ha estado la Edad Media, y los debates identitarios también".