JERUSALÉN, 11 Feb. (EP/AP) -
El Gabinete israelí votó hoy domingo a favor de que prosigan las obras en la Explanada de las Mezquitas, cerca del recinto sagrado de Al Aqsa, rechazando así las protestas del mundo musulman, según informaron fuentes del Gobierno.
Los operarios de construcción reanudaron la construcción de la rampa hacia la mezquita de Al Aqsa tras el descanso que impone la tradición del Sabbath, a pesar de las violentas protestas que han sacudido la zona durante las últimas 48 horas.
El portavoz de la policía de Jerusalén, Micky Rosenfeld, señaló que no había tenido lugar incidente alguno durante las primeras horas de su trabajo.
El secretario general de la Liga Árabe, Amr Musa, acusó ayer a Israel de "alterar las facciones" de Jerusalén con sus excavaciones cerca de la Explanada de las Mezquitas, y pidió a la comunidad internacional que interviniera para detener las obras.
"Existen planes para alterar las facciones de la ciudad", afirmó Musa en una declaración distribuida a los representantes en una reunión de emergencia en El Cairo.
Musa señaló, sin precisar más detalles, que la excavación "refleja los intentos de Israel" para reforzar su control sobre Jerusalén.
El secretario general afirmó que la Liga había mandado misivas al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon y a la UNESCO, advirtiendo de las repercusiones que la obra israelí podría tener sobre la paz en la región.
"Las violaciones israelíes provocan la ira y la condena en el mundo árabe, islámico y palestino, y amenaza la seguridad y la estabilidad en la región", señaló.
Israel ha explicado que el objetivo es reemplazar la actual rampa que permite el acceso al Monte del Templo a través de la Puerta Mugrabi, que se hundió hace tres años y fue sustituida por una estructura provisional de madera, y ha acusado a los "extremistas" de provocar para alterar los ánimos.