La justicia francesa no condena las caricaturas de Mahoma

PARÍS, 22 Mar. (EUROPA PRESS/ Salvador Martínez) -

El Tribunal Correccional de París dejó en libertad sin cargos a Phillipe Val, director del semanario satírico francés, 'Charlie Hebdo', a quien la Gran Mezquita de París, la Unión de las Organizaciones Islámicas de Francia (UOIF) y la Liga islámica mundial denunciaron por publicar tres caricaturas que los denunciantes consideraban "una injuria contra un grupo de personas en razón de su religión".

La justicia francesa consideró que las tres caricaturas en las que los denunciantes apoyaban su acusación no son constitutivas de "injurias". Aunque, según la sentencia judicial, alguno de los dibujos pueda ser considerado particularmente "hiriente", la justicia ha dejado en libertad sin cargos al director del semanario, Phillipe Val, quien respondía ante la justicia por ocupar el cargo de director de la publicación.

Las caricaturas publicadas en febrero de 2006 son un dibujo de Mahoma en el que se lamentaba diciendo "es duro ser amado por gilipollas", además de otras dos aparecidas en el diario danés 'Jyllandis Posten' en las que, por un lado, Mahoma, en el cielo, asegura a islamistas radicales que acaban de cometer un atentado suicida que no le "quedan vírgenes" y, por otro lado, Mahoma aparece retratado con un turbante que esconde a duras penas una bomba.

Val, reconoció en una rueda de prensa organizada esta tarde en la sede del semanario francés que Charle Hebdo es un "medio de comunicación que explota al máximo la libertad de expresión". El director de la revista calificó la decisión judicial de "buena noticia" no sólo para la publicación sino también para "todos los musulmanes laicos y demócratas, que no están representados por la UOIF ni la Gran Mezquita".

El director de Charlie Hebdo señaló la importancia de que Francia "sea el primer país europeo" en el que la justicia haya "dicho que no son los grupos religiosos, y menos aquellos que dicen representar a una comunidad entera, quienes deben legislar la libertad de expresión sino a los legisladores y, eventualmente, a los tribunales".

La reacción de los denunciantes ha estado marcada por la división. Los representantes de la UIOF afirmaron esta organización que recurriría la decisión del Tribunal Correccional. Por su parte, los abogados de la Gran Mezquita de París anunciaron que dicha institución no recurrirá la sentencia.