BEIRUT 31 May. (EP/AP) -
La milicia chií libanesa Hezbolá denunció hoy la decisión de la ONU de crear un tribunal internacional para juzgar el asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri y aseguró que se trata de una "violación" de la soberanía libanesa.
"La resolución, constituye tanto una violación del Estado libanés como un ataque a sus asuntos internos, es contraria a las leyes y cartas y principios de Naciones Unidas y los objetivos para los que se estableció", asegura un comunicado emitido por la organización.
"Por tanto, (la resolución) supone una violación flagrante que convierte a la resolución en ilegal e ilegítima a nivel nacional e internacional", agrega el comunicado.
El Consejo de Seguridad aprobó anoche, por un estrecho margen, la creación del tribunal que procese a los presuntos autores intelectuales y materiales del asesinato del ex primer ministro libanés, muerto en un atentado con bomba en el centro de Beirut el 14 de febrero de 2005, en el que murieron otras 22 personas.
Hezbolá ya se había manifestado contrario a la creación del tribunal. Hoy, el 'número dos' del brazo político de Hezbolá, Mahmud Komati, aseguró también en declaraciones a la televisión Al Arabiya que la resolución es "una violación de la soberanía libanesa porque el Consejo de Seguridad considera que Líbano no tiene instituciones constitucionales ni autoridad de Estado".
En el comunicado, Hezbolá decía que la resolución sitúa a Líbano bajo "la tutela internacional, sin poder de decisión ni soberanía de una manera sin precedentes en la historia de los Estados soberanos".
Asimismo, la organización asegura que el Gobierno está haciendo "un glorioso favor" a la Administración de Estados Unidos, de manera que pueda utilizar a Líbano como una carta que pueda ser utilizada para ejercer presión política.
La resolución del Consejo de Seguridad de la ONU fue aprobada con el respaldo de 10 miembros, cinco abstenciones --de Rusia, China, Sudáfrica, Indonesia y Qatar-- y ningún veto por parte de los cinco miembros permanentes del Consejo (Estados Unidos, Rusia, China, Reino Unido y Francia).
El Ejecutivo libanés de Fuad Siniora --quien solicitó en dos ocasiones mediante el envío de sendas cartas al secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, la intervención del organismo internacional-- así como el Parlamento libanés deberán ratificar la propuesta antes del 10 de junio, ya que para esa fecha, de no hacerlo, la resolución de la ONU entrará formalmente en vigor, y con ella el establecimiento de la instancia judicial.
Mientras que Estados Unidos, Reino Unido y Francia, los principales defensores de la actual resolución subrayaron la imposibilidad de no castigar los asesinatos políticos, los países que se han abstenido en la votación cuestionaron la capacidad de la ONU para eludir la soberanía del Parlamento libanés, organismo que debe ratificar también la creación de la instancia judicial, si bien su presidente, Nabi Berrih, del partido Amal y próximo a Hezbolá se negó a convocar en meses pasados la sesión parlamentaria para someter a examen la creación del tribunal, motivo por el cual Siniora recurrió a la ONU.