A medio camino para su cumplimiento solo un quinto de los europeos ha oído hablar de los Objetivos de Desarrollo del Milenio
BRUSELAS, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 20% de los europeos cree que luchar contra el hambre y la pobreza servirá para frenar los flujos migratorios de los países pobres a los ricos y el 19% cree que es un modo para "prevenir e impedir el desarrollo de condiciones favorables al terrorismo", según una encuesta publicada hoy por la Comisión Europea, que sitúa como primera motivación la "estabilidad global", con el 28% de las respuestas.
El Ejecutivo comunitario difundió un Eurobarómetro a medio camino del plazo que se fijó la comunidad internacional para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), en 2015. El primero que enumera la ONU en su lista de objetivos es "reducir la pobreza extrema y el hambre", que apoyan el 66% de los europeos.
La Comisión destaca el carácter "pragmático" de la ayuda al desarrollo a ojos de los europeos, ya que la principal motivación para ayudar a los países más pobres, con un 28%, es la "estabilidad global", el mismo porcentaje que los que aluden a "las ventajas económicas de incrementar el nivel de comercio entre los países donantes y los países receptores" de la ayuda.
Le siguen "apoyar la democracia y el buen gobierno" (22%), "evitar que los ciudadanos de estos países emigren a los países ricos" (20%) y "prevenir e impedir el desarrollo de condiciones favorables al terrorismo" (19%).
En términos generales, el 66% de los consultados considera una prioridad reducir la pobreza y el hambre en los países en vías de desarrollo, particularmente en la zona donde mayoritariamente creen que más necesaria es la ayuda, África Subsahariana (64%), seguido de India (34%).
El 46 % de los ciudadanos europeos opinan que la lucha contra el SIDA, la tuberculosis y otras enfermedades son los puntos más importantes de la ayuda europea al desarrollo. Le siguen la paz (43%) y los derechos humanos (37%).
Por otra parte, la encuesta refleja una "falta de conocimiento" sobre las iniciativas políticas de ayuda al desarrollo internacional, tales como los ODM o el Consenso Europeo para el Desarrollo, un conjunto de principios acordados por todas las instituciones de la Unión Europea en diciembre de 2005 para armonizar y dar mayor coherencia a la ayuda europea al desarrollo.
Así, sólo una "quinta parte" de los ciudadanos europeos han oído hablar de los ODM, y una cuarta parte del Consenso. Sin embargo, solo el 4% y el 5% respectivamente están familiarizados con su contenido.
Finalmente, los ciudadanos no parecen tener claro el valor de la UE como actor en el ámbito del desarrollo internacional. Un 28% no fueron capaces de seleccionar un factor que explicara el valor añadido de la UE respecto a los gobiernos europeos y el 5% respondió espontáneamente que ofrecer ayuda a través de la UE no ofrece ninguna ventaja.