- La Fiscalía pedía una pena tres veces mayor, de 175 años, y las víctimas anuncian recurrirán la sentencia
MADRID, 21 Jul. (OTR/PRESS) -
El pederasta Álvaro I.G., conocido como 'Nanysex', fue condenado hoy a 58 años de prisión como autor de cinco delitos de abusos sexuales, y seis de corrupción de menores, cometidos contra cinco niños entre 2002 y 2004. Nanisex ve así reducida a casi un tercio la pena a la que se enfrentaba ya que la Fiscalía pedia para él 175 años de prisión al considerar los hechos como agresiones sexuales y no abusos. Pero, al no encontrar evidencias del uso de la violencia o intimidación, el tribunal le condena únicamente por abusos y corrupción de menores reduciendo así notablemente su condena. Varios representantes de las víctimas ya anunciaron que van a recurrir la sentencia, pues los 58 años les parece una pena totalmente insuficiente para una persona que cometió delitos de tal calibre y sometió a niños y bebés a terribles aberraciones.
La Audiencia Provincial de Madrid condenó a 'Nanysex' a 58 años cárcel por cinco delitos de abusos sexuales y seis de corrupción de menores, a pesar de que la Fiscalía solicitaba 175 años por 23 delitos de abusos sexuales. La reducción en la condena se debe a que la resolución contempla como atenuante la colaboración del acusado con las autoridades, a pesar de la agravante de abuso de confianza, ya que se valía de su trabajo como canguro para tener acceso a sus víctimas.
Pero el punto más polémico de la sentencia es la consideración de de las atrocidades que 'Nanisex' perpetró no como agresiones sexuales, sino como abusos, el tipo penal de menor condena. El fiscal estimó que las vejaciones debían ser tipificadas como abusos, de ahí su petición de 175 años de cárcel, y no agresiones sexuales, aunque en las imágenes no se aprecian evidencias de violencia o de intimidación.
Algo que, apunta al Fiscalía y los abogados de las víctimas, no demuestra nada ya que a esas edades los niños no podían resistirse e incluso en muchos casos no eran conscientes de que estaban siendo objeto de agresiones por lo que no entienden que "el tribunal no aprecie el uso de fuerza ". Manuel Maza, representante de varias víctimas, declaró que "el fallo no se ajusta al derecho" y que "la pena es insuficiente", por lo que recurrirán la sentencia ante el Tribunal Constitucional.
El Defensor del menor de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, consideró asimismo inadmisible la pena interpuesta, incidiendo sobre todo en la decisión de que las vejaciones no fueran tipificadas como agresiones sexuales. Por ello insistió en la necesidad de reformar "inmediatamente" el Código Penal, de manera que estos delincuentes hagan frente a penas "más duras", y sin "ningún beneficio penitenciario".
A 'Nanysex' también se le impone la prohibición de acercarse y comunicarse con sus víctimas durante un periodo de diez años más tras ser excarcelado. Los magistrados le negaron la aplicación del atenuante de trastorno mental debido a la parafilia de tipo pedófilo que padece, pues desde el punto de vista penal no se considera "una enfermedad sexual". Según esta desviación, Alvaro sólo siente atracción por los menores de cinco años.
EL PADRE QUE AGREDIÓ A 'NANISEX'
En un juicio que estuvo marcado por la tensión de los familiares, los magistrados acordaron procesar al padre que propinó un puñetazo en la cara a 'Nanysex' en una de las vistas, a pesar de que ninguna parte lo solicitó. El fallo reconoce que la reacción es comprensible desde el punto de vista humano, pero que "la Sala no puede permitir" que se produzca durante la celebración de un juicio "ningún altercado o agresión".
Durante la jornada en la que testificaron los familiares de las víctimas se vivieron momentos de tensión. Los acusados fueron objeto de una tromba de insultos, e incluso una madre trató de abalanzarse sobre ellos en los pasillos de las dependencias judiciales. Las mujeres salieron sollozando tras los duros testimonios, y fueron consoladas por María del Mar Bermúdez, madre de Sandra Palo, la joven madrileña asesinada brutalmente en mayo de 2003.
OTROS TRES CONDENADOS
El resto de integrantes de la red de pederastas también recibieron penas, que oscilan entre los 31 y los tres años de cárcel. En concreto, se impone 31 años y medio de prisión a José G.C., apodado 'Aza', y que llegó a penetrar analmente a una de las víctimas, por dos delitos continuados de abusos sexuales, con la agravante de abuso de confianza, dos de corrupción de menores y otro de distribución de material pornográfico de menores.
A Eduardo S.M., alias 'Todd', se le condena a catorce años y medio por un delito continuado de abusos sexuales, tres de corrupción de menores y uno de distribución de pornografía infantil. Por último, a Antonio O.M. se le pena a tres años de prisión por difundir y distribuir materia pornográfico.
'Nanysex' y sus acólitos fueron detenidos en mayo de 2005, dentro de la 'Operación Kova', tras una investigación policial iniciada después de que la Secretaría General de Interpol en Lyon alertase a las autoridades del hallazgo de fotografías pornográficas de bebes, que podrían haber sido grabadas en España. De hecho, 'Nanysex' era considerado un mito en internet, debido a la calidad de las imágenes que tomaba, según se desprende de las sesiones plenarias.