MADRID, 21 Mar. (OTR/PRESS) -
Este lunes, 21 de marzo, se celebra el 'Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial', declarado como tal por la Asamblea General de las Naciones Unidas en octubre de 1966, y que recuerda la matanza de Sharpeville (Sudáfrica), una de las masacres más violentas, ocurrida el 21 de marzo de 1960 contra manifestantes que protestaban por la aplicación del Apartheid a manos de la policía sudafricana.
Durante la brutal represión por parte del gobierno, que abrió fuego contra los manifestantes que protestaban de forma pacífica, murieron 69 personas, entre hombres, mujeres y niños, y dejando además a 186 heridos.
La represión continuó luego con la persecución a los líderes y simpatizantes que se oponían al gobierno de población blanca, lo que llevó a una escalada de violencia en ese país.
Este año, el 'Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial', está dedicado a los desafíos y logros de la Declaración y Programa de Acción de Durban, 15 años después de que el histórico documento fuera aprobado en la Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia de 2001 en Sudáfrica.
El Programa de Acción de Durban contiene medidas de lucha contra el racismo en todas sus manifestaciones y subraya los derechos humanos de todos los grupos que padecen la discriminación racial y hace hincapié en su derecho a participar libremente y en pie de igualdad en la vida política, social, económica y cultural.
Según el organismo, existe la necesidad de poner en práctica lo que se acordó en esa declaración y el aniversario de este año ofrece la oportunidad de renovar el compromiso de tomar las medidas presentadas en su momento y para que todos los países, individual y colectivamente, intensifiquen los esfuerzos encaminados a reducir los casos de racismo, discriminación racial, xenofobia y formas conexas de intolerancia.
"Los afrodescendientes han sido durante siglos víctimas del racismo, la discriminación racial y la esclavización, y de la denegación histórica de muchos de sus derechos, y afirmamos que deben ser tratados con equidad y respeto de su dignidad, y que no deben sufrir discriminación de ningún tipo", expresa la Declaración de Durban.
Quince años después de la Conferencia de Durban "muy pocos progresos se han realizado en la lucha contra el racismo, la afrofobia, la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia", según expresaron el pasado jueves en Ginebra tres expertos en derechos humanos de las Naciones Unidas.
"El mundo es testigo de un aumento alarmante en el odio y el discurso xenófobo. Los gobiernos de todo el mundo deben hacer mucho más para proteger a los grupos vulnerables y castigar a los autores. La impunidad se ha convertido en la norma para lo que son crímenes aberrantes y esta es una situación muy alarmante", coincidieron en un mensaje el relator especial de la ONU sobre el racismo, Mutuma Ruteere, el presidente del Grupo de Trabajo de Expertos sobre las personas de ascendencia africana, Mireille Fanon Mendes-France, y el presidente del Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial, José Francisco Cali Tzay.