MADRID 4 Nov. (OTR/ PRESS) -
El ministro de Justicia de Turquía, Bekir Bozdag, ha afirmado este viernes que el atentado en la localidad de Diyarbakir (sureste) se ha saldado con víctimas mortales entre las fuerzas de seguridad y la población civil.
En su comunicado, recogido por el diario turco 'Hurriyet', Bozdag ha afirmado que "hay mártires entre los ciudadanos y la Policía", agregando que "muchos ciudadanos han resultado heridos".
"Turquía está llevando a cabo una lucha activa contra el terrorismo", ha resaltado, expresando sus condolencias a los familiares de las víctimas del ataque, ejecutado con coche bomba cerca de una comisaría de la ciudad.
Según las informaciones recogidas por los medios turcos, el ataque se habría saldado con al menos un muerto y 30 heridos, si bien el balance de víctimas podría aumentar.
La oficina del gobernador de Diyarbakir ha apuntado al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) como responsable, si bien el grupo no ha reclamado por el momento la autoría del atentado.
A esta comisaría fueron trasladados horas antes varios parlamentarios del prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP) detenidos por negarse a testificar por presuntos crímenes relacionados con "propaganda terrorista".
Entre los once detenidos en la operación, llevada a cabo en varias provincias del país, figuran los dos colíderes del HDP, Figen Yuksekdag y Selahattin Demirtas, quien fue detenido en su vivienda en Diyarbakir.
La Fiscalía ha reclamado ya el arresto de Demirtas y le ha imputado varios cargos por terrorismo. Los once parlamentarios fueron detenidos previamente por negarse a testificar por presuntos crímenes relacionados con "propaganda terrorista".
El HDP DENUNCIA QUE LAS DETENCIONES FORMAN PARTE DE UNA "OPERACIÓN POLÍTICA"
La formación prokurda Partido Democrático de los Trabajadores (HDP) ha denunciado este viernes la detención de sus colíderes y de otros nueve representantes parlamentarios por considerarlos parte de una "operación política" carente de base legal.
Ayhan Bilgen, portavoz del HDP, ha dicho que las detenciones tienen como objetivo lograr lo que el gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) no logró en las urnas en dos elecciones generales, en las que la formación prokurda consiguió el apoyo de más de cinco millones de electores.
En una comparecencia ante la prensa, Bilgen ha dicho que el HDP, que tiene raíces kurdas y es la tercera fuerza parlamentaria por número de escaños, tendrá una "reacción democrática" tras las detenciones, al tiempo que ha definido la operación policial como un intento por provocar una guerra civil.
Por su parte, el primer ministro turco, Binali Yildirim, ha asegurado que los parlamentarios opositores del HDP han sido arrestados por negarse a ser interrogados y ha asegurado que los diputados que se implican o alientan el terrorismo deben ser perseguidos por la justicia.
Yildirim ha admitido que los cargos electos por lo general solo pueden ser relevados de sus responsabilidades con otras elecciones pero ha subrayado que no puede ser así cuando están relacionados con el terrorismo.
LA ONU ADVIERTE AL GOBIERNO TURCO DE QUE ESTÁ YENDO "MÁS ALLÁ DE LO PERMISIBLE"
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha advertido a las autoridades turcas de que están yendo "más allá de lo permisible" en materia de ceses y arrestos, los últimos de ellos este mismo viernes durante una operación contra la cúpula del pro kurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP).
"Es necesaria la presunción de inocencia cuando se aparta a alguien de su puesto, cuando se detiene a alguien", ha recalcado la portavoz del Alto Comisionado, Ravina Shamdasani, en declaraciones a los medios. "Y habida cuenta de las cifras, nos tememos que no es el caso", ha apostillado.
Las autoridades han detenido o cesado a más de 110.000 funcionarios desde la intentona golpista de julio y este viernes han arrestado a más de una decena de miembros del HDP, entre ellos los líderes Figen Yuksekdag y Selahattin Demirtas, en el marco de una investigación sobre terrorismo.
Shamdasani ha recordado que en Turquía rige actualmente el estado de emergencia y ha apuntado que la opinión de la ONU es que "las autoridades están yendo más allá de lo permisible" al eliminar ciertos derechos e intensificar las medidas de represión.
PREOCUPACIÓN GENERALIZADA
Las suspicacias de la ONU también han sido secundadas por varios gobiernos europeos que no han dudado en cuestionar la legitimidad de la operación contra el HDP. El Gobierno aléman ha convocado al encargado de negocios turco para expresarle su descontento por la "drástica escalada de la situación", en palabras de un portavoz del Ministerio de Exteriores.
El Ejecutivo francés también ha instado a Turquía a respetar el Estado de Derecho y los derechos y libertades fundamentales. Un portavoz de la diplomacia gala, Romain Nadal, ha reconocido que París sigue con "grave preocupación" la evolución de los acontecimientos en el país euroasiático.