MADRID, 12 Nov. (Reuters/EP) -
Apple y HTC anunciaron el sábado un acuerdo mundial sobre patentes y un contrato de licencia de 10 años, que pone fin a uno de las primeras batallas en la guerra de patentes sobre teléfonos avanzados.
Apple demandó a HTC en 2010, acusando a la compañía taiwanesa de teléfonos móviles de violar tecnología patentada por el fabricante del iPhone. Fue la primera gran batalla legal de Apple contra un fabricante que utilizaba el sistema operativo Android de Google.
Apple y HTC no desvelaron términos específicos del acuerdo. En un comunicado conjunto, el consejero delegado de Apple, Tim Cook, dijo que estaba orgulloso de haber alcanzado el acuerdo.
"Continuaremos centrados en la innovación de productos", dijo Cook. El consejero delegado de HTC Peter Chou dijo que su compañía estaba contenta por haber resuelto la disputa así que podría "centrarse en la innovación en lugar de en los litigios".
Desde que Apple demandara primero a HTC, la guerra de patentes sobre teléfonos avanzados ha asaltado a rivales como Samsung Electronics y la unidad de Google Motorola Mobility.
El fabricante del iPhone ganó 1.050 millones de dólares (unos 826 millones de euros) en un veredicto contra Samsung en agosto, mientras que el pleito contra Motorola no ha producido victorias decisivas.
Sin embargo, Apple tuvo el mayor éxito contra HTC cuando llegó a utilizar el pleito para en realidad desbaratar el flujo de productos en el decisivo mercado de Estados Unidos.
A finales del año pasado, la Comisión Internacional de Comercio de Estados Unidos, determinó que HTC había violado una de las cuatro patentes sobre las que Apple había disputado e impuesto una prohibición de ventas en algunos de los teléfonos del fabricante taiwanés.
Aunque HTC dijo que había encontrado una solución técnica a las patentes de Apple, la compañía anunció en mayo que las ventas de sus teléfonos estaban siendo retenidas en las aduanas de Estados Unidos.
HTC se ha visto muy afectado por rivales como Apple y Samsung. El pasado mes HTC pronosticó una caída de sus ingresos en un 14,5 por ciento en el último trimestre respecto al tercero. Un pronóstico peor que el de analistas y el segundo consecutivo de descenso este año.