MADRID, 29 Sep. (Portaltic) -
Comprar una botella de agua tras un paseo en bicicleta o tomar un helado en la playa sin correr el riesgo de que te roben la cartera ya no es un problema. Kerv es el primer anillo de pago sin contacto del mundo, resistente al agua y que no requiere cargar su batería.
Kerv no necesita un 'smartphone' conectado cerca. Funciona acercándose a un terminal de pago. Las cantidades que pueden pagarse están restringidas a un máximo de 25 euros, que se configurarán directamente desde la cuenta bancaria, recargando el anillo cuando se quede sin saldo. Para proteger al portador, Kerv sólo efectuará el pago sin contacto en un radio muy pequeño, tratando de evitar transferencias no intencionadas.
El anillo no sólo podrá utilizarse para pequeñas compras sino para dejarte las monedas en casa al coger el metro. Kerv será compatible con redes de transporte de todo el mundo, que permitirán pagar el trayecto acercando el dispositivo al sensor de tarjetas.
El dispositivo está hecho de cerámica de zirconia, es ligero, hipoalergénico y, como ya se ha explicado, resistente al agua. El precio estimado de venta será de 49,99 libras aunque demás, los creadores de esta tecnológica joya están ofreciendo diez tamaños diferentes, ajustándose a las medidas más populares de anillos vendidas.
El anillo acaba de aterrizar en Kickstarter y ya ha alcanzado más de 32.000 libras y 755 patrocinadores. Aún quedan 27 días más para alcanzar el objetivo: 77.000 libras.