MADRID, 6 Nov. (Portaltic) -
¿La WiFi de tu casa no funciona como debería? ¿No llega a todas las habitaciones? Con estos pequeños repetidores puedes hacer una red WiFi en casa que consiga cubrir todas tus necesidades.
Por razones de distribución de paredes, de red eléctrica, del cableado de la fibra óptica o ADSL o, incluso, del propio módem que suministra la conexión inalámbrica, hay muchos hogares en los que la WiFi no cumple con su función como debería, y estos dispositivos quieren arreglar el problema.
Luma, que así se llama el aparato de la empresa con el mismo nombre, es un aparato que, al ser incluido en la red WiFi de la casa en cuestión, crea automáticamente una malla de red que se encarga de analizar y designar los caminos más eficientes por los que puede ir la conexión desde el router WiFi al aparato electrónico que la necesite – un ordenador, un ‘smartphone’, una tableta-.
Con ello, lo que se consigue es que el aparato actúe como un repetidor que optimiza lo que la red WiFi ofrece para distribuirlo, al mismo nivel, entre todos los dispositivos que están en ese momento utilizando la conexión.
“Luma te proporciona la WiFi más rápida en cualquier sitio. Desde el apartamento más pequeño hasta la casa más grande, hay muchas cosas que puedan afectar a la fuerza de la señal. Luma automáticamente crea una red personalizada para la casa en la que se esté utilizando, y es lo suficientemente inteligente como para potenciar la WiFi y que funcione a máxima velocidad en cualquier hora”, se puede leer en la página web del producto.
Este rasgo característico de Luma trae un punto positivo, que es que ningún aparato electrónico “robará” más conexión que otro, con lo que todos trabajaran al mismo nivel y la velocidad de datos estará optimizada, pero, al mismo tiempo, esto significa que un usuario que esté, por ejemplo, viendo una película en ‘streaming’ tendrá una velocidad más limitada con respecto a otro usuario de la misma casa que esté simplemente navegando por Google buscando un artículo de una revista. La necesidad de datos no es la misma, pero Luma lo administra por igual.
Otro de sus puntos fuertes es que todo su funcionamiento se controla desde una aplicación para ‘smartphones’ o tabletas – tanto para Android como para iOS - que es capaz de rastrear el tráfico de cada usuario y mostrar lo que cada uno está viendo. Con ello, se consiguen dos cosas: un control parental para los niños si la situación lo requiere y una protección contra intentos de ataques externos en la red, ya que el sistema puede saber si se trata de uno de sus usuarios normales o de un dispositivo sin autorización con intenciones de robarla conexión WiFi.
El precio de uno de estos aparatos es de 99 dólares en periodo de reserva o pre-compra. La página web también ha puesto una oferta de tres aparatos por 249 dólares, algo bastante útil ya que uno solo de estos repetidores pueden quedarse pequeños dependiendo de las dimensiones de la casa, del tipo de conexión que se tenga, de los aparatos que utilicen la WiFi, etc.
A pesar de que tenga sus puntos discutibles, como el hecho de que esté al tanto de las conexiones realizadas en el hogar, que a más de uno le puede sonar a una manera de espionaje o control casero “sutil”, las posibilidades que ofrece un Luma son bastante llamativas.