ZTE
MADRID, 24 Feb. (EDIZIONES/Portaltic) -
Tras meses y meses de rumores y solicitudes de patente protagonizadas por 'smartphones' con pantalla plegable, el fabricante chino ZTE se convirtió en la primera empresa en atreverse a llevar al mercado un terminal con esta innovadora característica. Octubre de 2017 fue la fecha elegida para presentar al mundo el AXON M, un modelo que ha llegado este mes a España y que ha pasado por las manos de Portaltic.
El 'smartphone' de ZTE basa su innovador diseño en la presencia de dos pantallas de 5,2 pulgadas unidas por una bisagra central, que habilitan un modo multitarea que, según la compañía asiática, nunca ha sido aplicado en el actual mercado móvil. A nivel 'software', la clave de esta arriesgada apuesta se encuentra en el botón 'M' que permite elegir la experiencia de uso del teléfono entre cuatro configuraciones posibles.
El manejo simple de este mecanismo es una de las principales claves del éxito del AXON M. Estos comandos, fácilmente memorizables, aceleran la familiarización con este peculiar 'smartphone'. De inicio, la función de pantalla extendida, que emplea ambos paneles como mitades de un mismo contenido, se muestra más idónea para tareas de lectura o de visionado de contenidos, al más puro estilo tableta, mientras la pantalla múltiple garantiza el uso simultáneo de dos aplicaciones, idóneo para agilizar tiempos en entornos de trabajo.
Más dudas ofrece el bautizado como modo espejo, que presenta el mismo contenido en ambas pantallas y que emplea la robusta bisagra del AXON M para convertir el teléfono en una especie de atril desde el que mostrar a otra persona una aplicación mientras el usuario la maneja. La idea, defendida desde ZTE como una herramienta profesional útil para videollamadas, apunta más bien a una interesante opción para juegos entre dos jugadores.
En un mundo donde a nadie extraña ya ver móviles con hasta cuatro cámaras, el AXON M también arriesga hacia lo simple: una sola cámara, eso sí, de 20 megapíxeles. La idea es sencilla, si se tiene un dispositivo con dos pantallas, ¿por qué no aprovecharlas para emplear en todos los casos esta potente lente? De esta forma, en función de si se quiere emplear el 'smartphone' como una cámara clásica o hacerse un selfi, será posible seleccionar la pantalla activa que mostrará la vista previa con la que esos 20 megapíxeles capturarán la realidad.
RIESGOS Y DEBILIDADES DE LA DOBLE PANTALLA
Con todas estas bondades de inicio, no podemos dejar de lado los riesgos y debilidades derivados de un doble panel plegable. En primer lugar, no se puede dudar de la fragilidad que supone manejar un terminal que, plegado, presenta una pantalla a cada lado y que, por tanto, no se utiliza con la misma confianza que un modelo clásico. Los golpes o rayaduras que se lleve el AXON M tendrán como víctima a una de sus pantallas, sin que esas sufridas carcasas puedan tener cabida. ZTE lo fía todo aquí al cristal Corning Gorilla de quinta generación que los protege.
Este diseño innovador también tiene como consecuencia una parte trasera, entendida esta como la ubicada detrás de las pantallas cuando ambas están desplegadas, poco estética y aprovechada. Realmente, es complicado idear algún componente para una parte del AXON M que, cuando está plegado, no puede presentar obstáculos, pero quizás esta era una ocasión idónea para incorporar una textura especialmente rugosa para impedir por completo cualquier deslizamiento.
Si la pantalla táctil es uno de los elementos que más batería consumen en un 'smartphone' convencional, un doble panel conlleva un incremento muy superior. Para ello, ZTE ha optado por una batería de 3.180 miliamperios hora que aguanta, pero sin alardes, la inusual exigencia de este dispositivo. Como remedio, el AXON M integra un sistema QuickCharge 3.0 de carga rápida.
Cuestiones de diseño aparte, ZTE ha querido que su nuevo y llamativo 'smartphone' presente algunas características identificables como de gama alta. Monta un procesador Qualcomm Snapdragon 821 --o lo que es lo mismo, un modelo de chip potente, pero no reciente-- y ofrece 4 gigabytes de memoria RAM, al igual que otros terminales referencia como el Samsung Galaxy S8, el Google Pixel 2 XL, el Huawei P10 o el LG V30. Es decir, lejos de experimentos, ZTE ha ido en serio con su AXON M, y pretende convertirlo en algo más que un precedente, sino en una más de las referencias del mercado.
En definitiva, ZTE ha dado unos primeros pasos en firme dentro de un producto con el que pretende cambiar el aspecto formal del mercado móvil. El AXON M ofrece potencia y una interesante interacción entre sus dos paneles, con unas debilidades que resultan comprensibles para un terminal que estrena un concepto nuevo. Su precio, de 852 euros, no impacta tanto como el de otros modelos de gama alta, por lo que se trata de un terminal más a tener en cuenta, especialmente para aquellos que desean explotar al máximo sus posibilidades profesionales.