MADRID, 17 Mar. (Portaltic/EP) -
El 99% de los adolescentes de 15 años tiene acceso a Internet, según recogen los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), una situación que plantea a los padres un desafío a la hora de tratar a sus hijos 'conectados'.
'Está siempre con el WhatsApp o el Facebook', 'no levanta los ojos del móvil', son frases comunes entre los padres que creen que sus hijos usan demasiado las nuevas tecnologías. En la actualidad, como señalan desde Energy Sistem, los padres se encuentran en tesituras que nadie les ha ayudado a gestionar.
El INE recoge en su estudio, basado en una encuesta realizada a 24.000 hogares, que el 94% de los adolescentes de 15 años dispone de teléfono móvil, mientras que, en ese mismo grupo de edad, los que tienen acceso a Internet son un 99,2%.
Los hábitos de consumo han cambiado entre los adolescentes españoles: ya prefieren consumir YouTube antes que ver la televisión. El 72% de los jóvenes reconoce ver diariamente más YouTube frente al 20% que se decanta por la televisión tradicional. Tan solo el 7% de los encuestados elige como primera opción la televisión de pago, según un análisis de la web de tendencias Cultture.
"Tanto el salto generacional entre padres e hijos como el cambio de dispositivos desde los que se disfruta del ocio ha causado que tanto niños como jóvenes sean huérfanos digitales", señala la responsable de Comunicación en Energy Sistem, Noemi Climent.
Esta nueva situación requiere que "una figura que les explique cuáles son los riesgos de navegar por Internet o cómo detectar amenazas hacia su privacidad", como apunta Climent. En este sentido, los datos de del estudio de Seguridad infantil y costumbres de los menores en Internet recoge datos alarmantes: el 54% de los menores no ha recibido formación alguna sobre las normas básicas de seguridad.
Además, el informe señala que el 86% de los menores usuarios accede a la Red desde ordenadores que no cuentan con ningún sistema de filtrado de contenidos y que entre el 28% y el 38% de los menores, accede a contenidos inseguros o nocivos (el informe recoge que este porcentaje aumenta con la edad).
Climent entiende que a muchos padres "les preocupa ver que sus hijos pasan demasiado tiempo delante de pantallas", pero también explica que las nuevas tecnologías han hecho que actividades como la lectura, el deporte o la pintura "sean mucho más intuitivas y creativas".
CONSEJOS
La responsable de Comunicación señala que es importante proporcionar a los menores "ayuda activa", es decir, "además de los conocimientos necesarios para concienciarlos sobre las consecuencias del uso inapropiado de la tecnología, acompañarlos para asegurar las buenas prácticas".
Una solución añadida es la de crear distintos usuarios y concederles diferentes permisos, una función disponible en terminales con la versión de Android 6.0 Marshmallow. Para ello es necesario entrar en el menú de 'Ajustes' y acceder a 'Usuarios'. Una vez dentro, se pueden añadir tantos usuarios como personas vayan a acceder al terminal y marcarlos como perfiles restringidos.
También es posible restringir las compras dentro de la aplicación ('in-app') en dispositivos Android. Desde el usuario paterno, si se accede a la propia aplicación de Google Play, es posible configurar un filtro de contenido con el que se pueden limitar las aplicaciones según los niveles de madurez. Solo es necesario elegir la opción adecuada para los hijos y crear un nuevo PIN para el contenido.
"Hay que aceptar que el ocio tecnológico es parte del ocio y aprendizaje de los menores", concluye Climent.