MADRID, 4 Nov. (Portaltic) -
¿Sospechas que te roban la red WiFi, pero no sabes cómo averiguarlo? Y, sobre todo, ¿cómo evitarlo? Los más pícaros, sin ganas de gastarse el dinero y de batallar con una operadora, optan por compartir, sin permiso, la conexión WiFi del vecino. Como nadie estamos libres de tener que lidiar con este problema, te ayudamos a detectarlo y a ponerle remedio.
CONEXIÓN LENTA
Las primeras sospechas vienen cuando la conexión a Internet se vuelve lenta, pero no de forma continuada, sino en determinados momentos u horas del día.
Si te ocurre esto, intenta descubrir si se debe a que alguien te está robando el WiFi. ¿Cómo? Lo primero que tendrás que hacer es una sencilla prueba.
Desconecta todos tus dispositivos de la red. Cuando lo hagas, la luz del router destinada a la WiFi deberá estabilizarse y no parpadear. Si lo sigue haciendo ¡alerta!
VARIOS DISPOSITIVOS CONECTADOS A LA RED
Ya has levantado la liebre, pero ¿cómo puedes confirmar tus sospechas? Una de las recomendaciones, que también hace la Comisión Nacional de Mercado y la Competencia (CNMC), es instalar en el ordenador y dispositivos móviles un programa que detecte todos los aparatos que están conectados a la red de casa.
En el caso de los ordenadores de sobremesa, los propios sistemas operativos de Windows, Mac y Linux ofrecen distintas herramientas de comprobación, como el Wireless Network Watcher. Además, existen aplicaciones gratuitas que pueden desempeñar esta labor, como son Angry IP Scanner y Wireshark.
También están disponibles para los dispositivos móviles y los diferentes sistemas operativos. Para Android te pueden servir Fing, Network Discovery y Net Scan, y para IOS puedes descargarte Fing, IP Network Scanner y iNet, por citar algunas.
Si detectas más dispositivos conectados a tu red de los que tienes en casa, acabas de afinar el tiro.
¿Y SI ALGUIEN SE CONECTÓ ANTES?
Puede darse el caso de que, cuando vayas a utilizar estas aplicaciones o programas, nadie esté robando tu WiFi, pero que sí lo haya hecho antes. Para averiguarlo, tendrás que introducir la dirección de tu router -la encontrarás en el manual o bien te la facilitará el operador- en la barra de direcciones del navegador de Internet.
De este modo, tendrás acceso a la web del router. Una vez dentro, deberás introducir tu contraseña, paso imprescindible para poder ver el registro de todas las conexiones realizadas hasta el momento. Será entonces cuando podrás comprobar si alguien se conectó con anterioridad y cuántas veces.
PROTECCIÓN DE LA RED
Si ya has confirmado que te toman el pelo y roban tu WiFi, ponle remedio. Debes reforzar la protección de tu red. Y te estarás preguntando, de nuevo, cómo. Pues bien, la CNMC también da una serie de consejos.
- Modifica la contraseña del WiFi que viene por defecto. Como siempre os decimos, las contraseñas deben ser largas y deben combinar letras (mayúsculas y minúsculas), números y símbolos.
- Configura el router de tal modo que solo los dispositivos que elijas, con sus direcciones MAC individuales, tengan acceso a la conexión. Pese a que también se podrían manipular, al menos, es una barrera más que dificulta el robo.
- Desactiva la asignación automática de las direcciones IP y asígnalas manualmente.
- Haz invisible tu WiFi o cambia el SSID. Otorgar otro nombre distinto a la conexión dificultará que un desconocido descubra cuál es tu operador y, por tanto, también tu contraseña. Si además haces invisible tu WiFi, evitarás que cuando alguien busque redes inalámbricas la tuya también sea localizable.
Pon estos consejos en práctica y evita que sigan disfrutando de Internet a tu costa.