LONDRES/HELSINKI, 18 May. (Reuters/EP) -
Nokia está recurriendo a sus reservas de efectivo a un ritmo insostenible, despertando lo que algunos analistas dicen que son dudas serias sobre la capacidad del fabricante finlandés de teléfonos para estabilizar sus finanzas en los próximos meses.
Con el coste de la deuda de Nokia en alza, los analistas más pesimistas dijeron en un sondeo de Reuters que la compañía podría incluso estar en riesgo de una cesación de pagos si no logra contener el gasto de efectivo.
En los últimos cinco trimestres, la que fuera en el pasado la compañía favorita de los usuarios tecnológicos ha consumido 2.100 millones de euros de efectivo, un ritmo que acabaría con sus reservas de 4.900 millones de euros en un par de años.
Los analistas esperan en promedio que la firma queme casi 2.000 millones de dólares más en apenas tres trimestres, mientras que los más pesimistas consideran la posibilidad de que la compañía gaste sus 4.900 millones de euros de efectivo neto por completo el año próximo, según el sondeo de Reuters entre 30 bancos y agentes.
"En nuestra opinión, podría darse la posibilidad de que la compañía tenga problemas para devolver incluso su bono a más corto plazo de 2014", dijo el analista de crédito de Société Générale Juliano Torii.
La firma, que tuvo más de 10.000 millones de euros en efectivo en 2007, tiene dos vencimientos de bonos: 1.250 millones de euros al 5,5 por ciento en 2014 y 500 millones al 6,75 por ciento en 2019. Un portavoz de Nokia dijo que mejorar el flujo de efectivo era un objetivo importante.
"Nokia está aplicando un plan de acción decisivo para posicionar a nuestra compañía hacia el crecimiento y el éxito futuro", dijo el portavoz James Etheridge. "El principal foco de estas acciones es bajar los costos de la compañía, mejorar el flujo de efectivo y mantener una posición financiera fuerte", añadió.
LUMIA NO CONVENCE
Nokia, que dominó el mercado de los móviles en el pasado, ha ido cayendo ante el aluvión de los teléfonos inteligentes. Apple, fabricante del fenómeno iPhone, dijo el mes pasado que su beneficio se había prácticamente doblado en el primer trimestre de 2012, acallando a quienes creían que sus días de fuerte crecimiento habían acabado. Mientras, la respuesta de Nokia al iPhone, el Lumia, no ha demostrado ser competitiva.
"El Lumia fue un intento de ponerse al día, pero simplemente fue poco y muy tarde", dijo Nancy Utterback, estratega de crédito en Aviva Investors.
Pero no todos son tan pesimistas. Aunque los más sombríos dudan de la capacidad de Nokia para mantener liquidez, el promedio de los encuestados consideró que la firma terminaría 2012 con 2.800 millones de euros en efectivo neto. Si puede reducir la velocidad a la que gasta dinero no tendría muchos obstáculos importantes para pagar el bono a más corto plazo.
"El grupo parece tener suficiente liquidez, incluso bajo presunciones operativas razonablemente onerosas", dijo Jens Vanbrabant, director de cartera en European Credit Management.
Y hay algo de optimismo a medida que Nokia incrementa su producción de nuevos teléfonos que usan el software Windows Phone de Microsoft. En promedio, los analistas esperan que Nokia venda 46 millones de teléfonos el año próximo, frente a los 20 millones que se esperaban este año.
Pero el rápido revés para la fortuna de la compañía ha puesto a Nokia ante una montaña difícil de escalar. "Hay posibilidad de que Nokia se recupere, pero va a ser difícil", dijo un banquero corporativo. "El mercado se mueve rápido y un simple desliz puede costar a la compañía su futuro", añadió.
Si Nokia no mejora su fortuna, algunos analistas dicen que Microsoft podría ir al rescate. Después de todo, no sólo el Lumia lleva un software de Microsoft, además el presidente ejecutivo de Nokia, Stephen Elop, fue directivo en la firma fundada por Bill Gates.