MADRID, 3 Jun. (Portaltic) -
El fotógrafo y pintor Richard Prince exhibió en la feria de arte Frieze de Nueva York una muestra de capturas de pantalla de fotografías publicadas por usuarios en Instagram sin su permiso, que ha conseguido vender casi en su totalidad por 90.000 dólares (82.600 euros al cambio) cada una.
Antes de la inauguración de la exposición a la que Prince llamó 'New Portraits', accedió a Instagram en busca de retratos que respondieran a un gusto estético muy particular: mujeres semidesnudas y atractivas que posasen para la cámara. Tras dejar un comentario en cada fotografía, imprimiendo una marca personal sobre ella, el artista tomó capturas de pantalla e imprimió esas imágenes.
La venta de estas capturas de pantalla por 90.000 dólares ha provocado, en consecuencia, un gran revuelo e indignación entre los usuarios de las redes sociales. "Los usuarios de Instagram son dueños de sus fotografías. Punto", ha afirmado una fuente de Instagram al diario The Washington Post.