MADRID, 7 Nov. (Portaltic/EP) -
Si eres un fan de 'Regreso al Futuro II' sabrás que la mitad de las predicciones futuras realizadas en los años ochenta ya forman parte de nuestro día a día. Sin embargo, los guionistas no predijeron que cualquier aparato de casa pudiera conectarse a Internet, con el peligro de poder ser 'hackeado' y controlados mediante 'ransomware' sin que nosotros podamos hacer nada.
"Todos los dispositivos que hay conectados a Internet en tu casa son un potencial ejército de zombies cargados de virus esperando a que un ciberdelincuente los despierte, si no cuentas con un sistema de seguridad que los vigile y los proteja a todos a la vez", señala el product manager de Panda Security, Hervé Lambert.
Para evitarlo, Panda Security presenta algunos de los ciberataques que podríamos sufrir en nuestro propia casa. "Estamos trabajando en ayudarte a que evites todo tipo de ataques de 'ramsomware' que podrías recibir a través de cualquier dispositivo que tienes en casa, desde la puerta del garaje que se conecta a tu móvil, hasta el contador de la luz", destaca Lambert.
Aunque creamos que todas las amenazas provenientes de 'hackers' son para obtener información personal, muchos ataques pueden ser bromas de mal gusto. Por ejemplo, los atacantes podrían comprar leche o papel higiénico sin que nosotros podamos hacer nada o podrían controlar nuestra aspiradora y encenderla todos los días a las tres de la mañana, entre otras posibilidades.
No obstante, no todo lo que los cibercriminales podrían hacer es comprar comida o encender el aspirador utilizando técnicas de 'ramsonware'. La imaginación de estos delincuentes es casi infinita y, por ejemplo, podrían secuestrar tu lavavajillas e inutilizarlo cuando lo tengas lleno de platos hasta que no pagues un rescate o podrían tomar el control del coche y programarlo para que el motor acelere a fondo o para que el sistema de frenos deje de funcionar.
Aparte de controlar cualquier dispositivo conectado al Internet de las cosas, los delincuentes podrán sonsacar información sensible a través de redes sociales para hundir tu reputación o hacerse con tus claves del banco, o incluso, convertirte en víctima de acoso.