Windows 10 y privacidad: ¿qué desactivar para tener todo en orden?

Actualizado: lunes, 28 marzo 2016 13:07

   MADRID, 28 Mar. (EDIZIONES/Portaltic) -

Windows 10 salió al mercado masivo el 29 de julio del pasado año 2015. A pesar de que incorporaba muchas características útiles, como es el caso de función Continuum o del nuevo navegador Microsoft Edge, y una interfaz renovada, desde sus primeras semanas estuvo inmerso en una eterna polémica que llega hasta hoy en día: el tema de la privacidad.

   La última versión del sistema operativo de Microsoft tenía una importante labor. Por un lado, debía captar a los usuarios inconformistas, a los que Windows 8 no acabó de cautivar, y, por otro, tenía que conseguir que quienes estaban anclados en Windows 7 abrieran la puerta al nuevo 'software' en sus ordenadores.

   ¿Cómo han logrado los de Redmond alzar a Windows 10 como el segundo sistema operativo más utilizado del mundo? Gracias, sobre todo, a actualizaciones totalmente gratuitas para aquellos que tuvieran una copia oficial de las dos versiones anteriores, algo accesible para los que se hubieran hecho años antes con un portátil con Windows y para muchos con ordenadores de sobremesa.

   La gente tiende a no leer los acuerdos de términos y condiciones por ser extensos y, para qué negarlo, bastante aburridos. Si a esto le sumas el hecho de que el producto les ha sido entregado de forma gratuita, el resultado puede ser caótico – muchos instalamos cosas en el ordenador o en los teléfonos móviles sin saber qué es, admitámoslo –.

   Desde que el 1 de agosto entraran en vigor las nuevas políticas de privacidad del servicio. Mucho se ha hablado sobre el tema porque, al parecer, Microsoft habría incluido determinadas opciones de privacidad nada favorables para los clientes. Por todo el mundo se han leído cosas que afirmaba que la compañía estaba espiando a los usuarios, ¿pero realmente es así?

   “Microsoft recopila datos para operar con eficacia y proporcionar las mejores experiencias con nuestros servicios [...]. Obtenemos algo de ellos al registrar la manera en que inteactúa con nuestros servicios, por ejemplo, el uso de tecnologías como 'cookies' y la recepción de informes de errores o datos de uso de 'software' que se ejecuta en su dispositivo. También obtenemos datos de terceros. Los datos que recopilamos dependen de los servicios y funciones que usted use, e incluyen lo siguiente: nombre y datos de contacto, credenciales, datos demográficos, intereses y favoritos, datos de pago, datos de uso, contactos y relaciones, datos de ubicación, contenido (de correo electrónico, grabaciones de audio y vídeo)”, se puede leer en el apartado de privacidad de la página web de la compañía. ¿Qué recopila entonces? Prácticamente todo.

   Acostumbrados a no leer los acuerdos de usuario antes de aceptarlos, habrá mucha gente a la que algunas de esas opciones les parezcan bastante alarmistas, pero lo cierto es que cosas como utilizar la localización de cara a mejorar la experiencia de usuario es algo que también se incluye en otros sistemas, como es el caso de iOS y Android.

   Aún así, no está de más conocer qué opciones u elementos desactivar para tener toda la privacidad de Windows 10 en orden o, mejor dicho, bajo tu propio control, ya que lo que para unos es aceptable, para otros puede ser totalmente impensable.

   Antes de nada, abre el menú de inicio y pulsa sobre Configuración > Privacidad. ¿Listo? Pues veamos los puntos más importantes de cada apartado.

   AJUSTES GENERALES

   Como bien indica la palabra “generales”, estos ajustes son los más genéricos de todas las secciones. Actives o desactives las diferentes opciones, no deberías notar una gran diferencia en tu experiencia como usuario, por lo que los gustos personales de cada persona y de su privacidad son un buen condicionante a la hora de elegir una u otra opción.

   La primera de las cosas que aparecen en la lista, “permitir que las aplicaciones usen mi id. de publicidad para experiencia entre aplicaciones”, es básicamente para que Microsoft te muestre contenido publicitario más acorde a tus intereses. Los datos necesarios para esto los saca de las búsquedas que puedes realizar en su navegador o en Cortana, entre otras cosas. Desactívalo sin problemas si no quieres que la compañía recopile este tipo de datos.

   En cuanto a “activar el filtro de Smartscreen”, esto es útil solo si compras aplicaciones en Windows Store, ya que sirve para que el sistema revise si los diferentes sitios que visitas a través de ellas son o no seguros. ¿No compras 'apps'? Desactívalo si así te sientes más a gusto.

   El punto más importante aquí es el apartado de “enviar información a Microsoft sobre cómo escribo”. Teóricamente, los de Redmond recogen información de lo que escribes con el teclado – ya sea físico o virtual si hablamos de una tableta o de un teléfono móvil – para mejorar cosas como la función de autocompletar. No es algo que sea realmente útil, por lo que desactivarlo no está de más.

   AJUSTES DE LOCALIZACIÓN

   Al igual que ocurre con sistemas operativos móviles de la competencia – Android, de Google; iOS, de Apple –, Windows 10 recoge información de tu ubicación para mejorar la experiencia de uso en algunas de las aplicaciones.

   Lo más habitual es que no tengas que introducir datos como dónde te encuentras cada vez que quieras consultar los mapas, pero en la mayoría de estos casos la ubicación se comparte con terceros para proporcionarte los datos deseados o para hacer más sencilla la consulta que estés realizando.

   Si usas el sistema operativo en un 'smartphone' puedes plantearte tener la opción activada solo cuando vayas a utilizar el GPS o a consultar direcciones, pero si tienes Windows 10 en un ordenador, desactiva totalmente la localización pulsando en el botón que viene activado de fábrica en esta sección.

   AJUSTES DE CÁMARA

   Estos ajustes son, en general, algo que le preocupa bastante a la gente que utiliza portátiles. De hecho, seguramente hayas visto a más de uno tener una pegatina en la 'webcam' para evitar que si 'hackean' su ordenador tengan control sobre la misma y puedan espiarles.

   Windows da la opción de que las aplicaciones utilicen la cámara para su propio funcionamiento, pero según el acuerdo de privacidad del que ya se ha hablado, también pueden recoger grabaciones de vídeo con la excusa de “mejorar la experiencia de los servicios”.

   En principio no deberías tener problemas ya que este tipo de contenido no deberían poder difundirlo, pero para no tentar a la suerte, nunca está de más que desactives el botón. Justo debajo del mismo tienes una dirección que te llevará a un texto con más información sobre el asunto, échale un ojo si tienes alguna duda.

   AJUSTES DE MICRÓFONO

   Misma situación que con el tema de la cámara. Microsoft puede guardar grabaciones de audio, por lo que no es mala idea tenerlo desactivado.

   Aún así, al igual que ocurre en el punto anterior, siempre puedes dejar el botón encendido para que las aplicaciones puedan acceder al micrófono y desactivar una a una aquellas que no te interese que puedan tener acceso a él.

   De esta forma, si utilizas un ordenador portátil – en los ordenadores de sobremesa, al no tener micrófono integrado, si tienes la opción deshabilitada y enchufas tu propio micrófono en el conector no tendrás problemas para que funcione correctamente – puedes dejar encendida la aplicación de Skype, si lo utilizas para hablar con gente o realizar videollamadas, y poner en 'off' el resto.

   AJUSTES DE VOZ, ENTRADA MANUSCRITA Y ESCRITURA

   Aquí está la mayor preocupación en cuanto a privacidad en Windows 10 se refiere.

   Encima del botón “Dejar de conocerme”, Microsoft explica para qué es esta función. Básicamente, tanto el sistema operativo como Cortana, el asistente de voz, pueden utilizar tanto la voz como la escritura para mejorar, una vez más, la experiencia de usuario con sugerencias más adecuadas.

   Aunque pone algunos de los ejemplos de lo que recopila (calendario, eventos o contactos), no especifica todo lo que recoge y el texto escrito es un tanto ambiguo en lo que a usos concretos de esos datos se refiere.

   Desactivar la opción implica dejar de utilizar Cortana. Ahora es un buen momento para preguntarte si de verdad usas el asistente de voz o si simplemente esta ahí porque viene de fábrica y no sabes cómo quitarlo. Si estás en el segundo caso, no te lo pienses y dile a Windows que “deje de conocerte”.

   AJUSTES DE COMENTARIOS Y DIAGNÓSTICOS

   Si no quieres que Windows te pida que le envíes datos en forma de comentarios selecciona la opción “nunca” en el primer desplegable. Además de evitarte dar información tuya y de tu dispositivo a la Microsoft, también te evitarás las notificaciones de avisos correspondientes.

   En cuanto al diagnóstico de los datos utilizados, también puedes seleccionar qué cantidad de los mismos le enviás a la compañía, pero no desactivarlo totalmente, ya que Microsoft no lo permite. Si elijes la opción de “básicos”, solo se enviarán los datos mínimos y necesarios para que el sistema operativo siga funcionando correctamente, es decir, datos referentes a las actualizaciones, por ejemplo.

CORTANA, EL ASISTENTE VIRTUAL

Cortana ha sido uno de los nuevos añadidos que han acompañado a Windows 10 desde el momento de su salida. Presentado como un asistente virtual y por voz muy cómodo, es cierto que para los ordenadores no tiene por qué ser tan necesario como lo puede ser en un teléfono móvil (Cortana es como Siri o Google Now).

   Algunos de los datos que requiere Cortana para funcionar son el registro de la voz para comprender lo que estás diciendo, la ubicación para dar respuestas más adecuadas respecto a tu zona, información sobre lo que escribes, etc. Dado que la lista continúa, está claro que el asistente necesita mucha de tu privacidad para proporcionarte una ayuda adecuada.

   Aunque no tenga muchas diferencias en cuanto a lo que piden Siri o Google Now, bien es cierto que, si no lo usas – sobre todo en el caso del ordenador, ya que es más normal que busques las cosas directamente en la barra de inicio o uses el buscador de tu navegador de Internet –, puedes ahorrarte muchas cosas.

   Para desactivar Cortana tienes que abrir el menú de inicio y escribir cualquier cosa, aunque sea “hola”. Así, se abrirá directamente la zona de búsqueda de Cortana y, arriba a la derecha, aparecerá un botón de “configuración”.

   La primera de las opciones a desactivar es para deshabilitar completamente el asistente. La segunda sirve, una vez apagada Cortana, para que Windows te envíe sugerencias desde el menú de inicio y guarde un registro de lo que escribes para mandárselo a Microsoft. Puedes desactivarlo o no, a tu elección, pero es algo que ya ocurre en dominios como el del buscador de Google, o en navegadores como Firefox.

   INICIO DE SESIÓN

   Cuando instalas Windows 10, para poder acceder al dispositivo tendrás que iniciar sesión con una cuenta de usuario. Aunque te pida que utilices una de Microsoft, también puedes emplear una local.

   ¿Para qué sirve utilizar una local? Para que, por ejemplo, la compañía no tenga acceso al número de veces que usas el ordenador ni por cuánto tiempo lo mantienes encendido, pero, a cambio, no podrás sincronizar los datos de tu ordenador para poder acceder a ellos desde cualquier dispositivo con Windows 10 (esto solo se puede hacer con la cuenta de Microsoft).

   Para cambiar la cuenta a una local tienes que ir a Inicio > Configuración > Cuentas > Tu cuenta > Iniciar sesión con una cuenta local. Una vez que llegues aquí, Windows te pedirá que elijas un nombre de usuario y una contraseña y que cierres sesión para entrar con esta nueva cuenta.

   Además de no poder sincronizar datos, con una cuenta local tampoco se puede utilizar Cortana – no pasa nada si ya lo tienes desactivado –, encriptar los discos o descargar/comprar aplicaciones en Windows Store.

   PUBLICIDAD EN LA PANTALLA DE BLOQUEO

   Durante los meses de enero y febrero empezaron a aparecer por las redes sociales de todo el mundo casos de usuarios a los que les había aparecido publicidad en su pantalla de bloqueo sin que ellos la colocaran en el lugar o dieran el visto bueno para su aparición.

   El punto en común de todos estos usuarios es que tienen la versión gratuita de Windows 10, es decir, aquella procedente de la actualización de Windows 7 o Windows 8.

   La parte positiva es que, si buscas un poco, se puede desactivar perfectamente. Para ello, hay que ir a Configuración > Personalización > Pantalla de bloqueo y desactivar “mostrar datos curiosos, sugerencias, consejos y más en la pantalla de bloqueo”.

   ¿USAS MICROSOFT EDGE?

   Si usas Microsoft Edge, quédate porque te interesará ver qué opciones desactivar para restringir algo más las opciones de privacidad.

   Para ver las opciones de privacidad de Edge tienes que ir a Configuración > Configuración avanzada una vez abierto el navegador. Si ya has desactivado Cortana, la opción “permitir que Cortana me ayude en Microsoft Edge” la puedes dejar activada, ya que el asistente no tendrá acceso al historial igualmente; en cuanto a “mostrar sugerencias de búsqueda al escribir”, se refiere a que registra lo que se teclea en él, así que es buena idea desactivar la opción; por último, “proteger mi PC contra las descargas y los sitios malintencionados” está relacionado con la protección de sitios maliciosos, por lo que no es recomendable desactivarla.