El CERN confirma que nada hay más rapido que la luz, como dijo Einstein

MADRID 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) ha confirmado este viernes que no hay nada más rápido que la luz, que el 'tiempo de vuelo' de los neutrinos es constante y, por tanto, no se contradice la Teoría de la Relatividad Especial de Einstein, que determina que la velocidad de la luz es constante y no relativa al movimiento, es decir, la velocidad máxima que puede darse es la de la luz y no puede haber nada más rápido.

Ha sido en la 25 edición de la conferencia internacional sobre Física de neutrinos y Astrofísica en Kyoto (Japón), 'NEUTRINO 2012', donde el director general de Investigación del CERN, Sergio Bertolucci, ha presentado los resultados sobre el tiempo de vuelo de los neutrinos desde el CERN hasta el laboratorio de Gran Sasso, en representación de cuatro experimentos y que demuestra que los neutrinos respetan el límite de velocidad cósmico.

Así, se trata de 'Borexino', 'ICARUS', 'LVD' y 'OPERA', que midieron ese 'tiempo de vuelo' del neutrino constante con la velocidad de la luz.

En concreto, esta conclusión está en desacuerdo con una medida que la colaboración 'OPERA' puso a disposición de la comunidad científica para su examen en septiembre pasado, lo que indica que la medida original de OPERA puede ser atribuida a un elemento defectuoso del sistema de fibra óptica que mide el tiempo del experimento.

"A pesar de que este resultado no es tan emocionante como algunos hubieran deseado es el que todos esperábamos. La Historia ha cautivado la imaginación del público y ha dado la oportunidad de ver el método científico en acción: un resultado inesperado es puesto a disposición para su escrutinio, minuciosamente investigado y resuelto en parte gracias a la colaboración entre experimentos habitualmente competidores. Así es como la ciencia avanza", ha resaltado Bertolucci.

TECNOLOGÍA ESPAÑOLA

Por otro lado, el CERN ha utilizado tecnología desarrollada en España para mejorar las medidas de la velocidad de los neutrinos del experimento 'OPERA'. En concreto, esta tecnología se denomina 'White Rabbit' y es capaz de sincronizar hasta 2.000 nodos separados por más de diez kilómetros con una precisión de un nanosegundo.

Según el responsable del proyecto 'White Rabbit' en el CERN, este sistema ha sido "crucial" al menos en OPERA e ICARUS, otro experimento situado en el Laboratorio Subterráneo de Gran Sasso, porque permite detectar posibles errores.

Así, 'White Rabbit' se ha utilizado para garantizar la redundancia del antiguo enlace de sincronización en OPERA (que tuvo el problema de conexión), así como para caracterizar uno de los osciladores OCXO que controla la frecuencia en transmisiones que, según se descubrió a principios de 2012, no estaba en su frecuencia nominal.