MADRID 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
Astrónomos del Instituto de Tecnología de California (Caltech) han descubierto que el planeta enano 2007 OR10 (conocido como 'Blancanieves') es un mundo helado, con la mitad de su superficie cubierta de hielo de agua que, antiguamente, fluía a través de volcanes. Además, los nuevos hallazgos sugieren que el planeta, cuya superficie es de color rojo, está cubierto por una fina capa de metano, restos de una atmósfera que poco a poco se pierde en el espacio.
Según han señalado los autores principales de este estudio, que se publicará en el 'Astrophysical Journal Letters', Mike Brown y Barbara Rosemberg, este hallazgo permite "ver lo que alguna vez fue un pequeño mundo activo con volcanes agua y una atmósfera, y ahora acaba estando congelado, muerto, con una atmósfera que poco a poco se va desvaneciendo".
El planeta 'Blancanieves' fue descubierto en el 2007 como parte de la tesis doctoral del ex estudiante graduado de Brown Meg Schwamb. El planeta enano órbita alrededor del Sol en el borde del sistema solar y es aproximadamente la mitad del tamaño de Plutón, por lo que es el quinto planeta enano.
Cuando hizo su descubrimiento, el estudiante había supuesto erróneamente que se trataba de un cuerpo helado que se había desprendido de otro planeta llamado Haumea, así que lo apodaron Blancanieves por su presunto color blanco. Sin embargo, las observaciones de seguimiento revelaron que Blancanieves es en realidad uno más de los objetos rojos que pululan por esa zona del sistema solar.
A partir de entonces, los expertos estudiaron a 2007 OR10 con el fin de explicar el por qué del color rojo a pesar de estar cubierto de hielo de agua que es "casi siempre blanco" y la solución la hallaron en otro planeta enano, Quaoar, descubierto en 2002. Quaoar es ligeramente menor que Blancanieves, pero lo suficientemente grande como para haber tenido una atmósfera y una superficie cubierta de volcanes que arrojaron un hielo derretido, que luego se congeló a medida que fluía sobre la superficie.
Precisamente, los científicos sabía que por su tamaño en Quaoar no se podían retener para siempre compuestos volátiles como el metano, monóxido de carbono o nitrógeno. De este modo, se sabe que miles de millones de años después de haberse formado, el planeta empezó a perder su atmósfera en el espacio y actualmente lo único que queda es algo de metano.
"Blancanieves es similar al de Quaoar, lo que sugiere que lo que sucedió en Quaoar también sucedió en 2007 OR10", han explicado Brown y Rosemberg, quienes señalan que el color rojo del hielo se debe al metano. Aún así, la presencia del metano no es aún definitiva. Para averiguarlo, los astrónomos tendrán que utilizar un gran telescopio.