MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El Very Large Telescope (VLT) de la ESO ha hallado una estrella con un tamaño 150 veces superior a la masa del Sol y tres millones de veces más brillante, aunque los expertos destacan que su peculiaridad reside en que se encuentra aislada y no en un cúmulo de estrellas, como había ocurrido hasta ahora.
Así, los astrónomos de la ESO señalan que lo habitual es que estas "superestrellas" estén rodeadas de otros cuerpos más pequeños que se van formando a su alrededor. El aislamiento de esta estrella supone que su origen sea "una incógnita" para los expertos que barajan un caso "excepcional" de que halla nacido sola o que fuera expulsada de un cúmulo de estrellas.
El hallazgo se ha producido en la Nebulosa de la Tarántula, en la Gran Nube de Magallanes, una pequeña galaxia vecina de la Vía Láctea y que los astrónomos llevan estudiando desde hace años.
El principal autor de este estudio, Joachim Bestenlehner, ha asegurado que su equipo se ha quedado "muy sorprendido al encontrar una estrella tan masiva solitaria y no en un cúmulo de estrellas". Del mismo modo, ha explicado que, ahora, la intención de los expertos es estudiar la zona en la que se halla.
En este sentido, otro miembro del equipo Jorick Vink, ha explicado que "es más fácil que una estrella tan grande se forme en un cúmulo que aislada", aunque ha apuntado que "no es imposible". "Sin embargo para los científicos es más difícil entender cómo estos grandes 'faros' se pueden formar por su cuenta", ha indicado.
Concretamente, esta estrella se encuentra en "una enorme región de gas y polvo" lo que, según Bestenlehner es "una guardería de estrellas, una región muy activa en cuanto a formación estelar". Sin embargo, el VLT ha encontrado que las nubes de polvo también absorben gran parte de la energía de la estrella.
Actualmente, el problema del equipo es que las estrellas con estas propiedades "inusuales" tienen una vida muy corta, por lo que no tendrán mucho tiempo para estudiarla.