MADRID 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
La educación diferenciada reduce el abandono escolar prematuro, ayuda al alumnado a que se centre en la tarea académica y favorece a los estudiantes con más dificultades, según ha indicado la profesora de Derecho Constitucional y Administrativo de la Universidad de St. John's de Nueva York, Rosemary Salomone.
En un desayuno-coloquio organizado por al Confederación de Familias y padres de Alumnos (COFAPA) en Madrid, esta experta ha defendido el modelo de educación diferenciada que se desarrolla en Estados Unidos y ha destacado el consenso político alcanzado en este país para que la enseñanza pública también cuente con un sistema que separa a los alumnos por sexo.
Tras hacer un repaso sobre el proceso de implantación de este tipo de educación en EE.UU., esta profesora ha explicado también los argumentos en contra de este modelo de enseñanza emitidos por distintos colectivos de defensa de los derechos y libertades civiles, tras la apertura, a mediados de los 90, de un colegio de niñas con dificultades socioeconómicas en Harlem (Nueva York). Estos colectivos lo consideraron "discriminatorio y perpetuador de estereotipos negativos".
Tras la experiencia en este colegio en el barrio neoyorkino, donde el cien por cien de las alumnas de la primera generación continuó estudiando en la universidad, Salomone ha señalado que, hasta 2002, con la Ley 'Que ningún niño se quede atrás', los centros de educación diferenciada no comenzaron a recibir fondos públicos. Asimismo, ha destacado que esta norma contó con el apoyo de republicanos y demócratas.
Entre los "beneficios" de la enseñanza diferenciada, la profesora ha destacado que ayuda a que los estudiantes eviten los estereotipos, favorece su desarrollo personal y capacidad de liderazgo, facilita al alumnado un entorno que le ayuda a centrarse en la tarea académica con mayor proyección hacia la elección universitaria, ayuda a los estudiantes con más dificultades, proporciona seguridad emocional o amplía las perspectivas intelectuales del alumnado.
Salomone ha indicado que el "éxito" del modelo diferenciado se puede medir no sólo con los resultados académicos de los estudiantes, sino a través el porcentaje de abandono escolar, los resultados de las pruebas de acceso a la universidad, el acceso a universidades de mayor prestigio, o a través de los problemas de convivencia y disciplina, entre otros parámetros.
Por último, ha indicado que la educación diferenciada debe responder a una opción de "libertad personal", pues, según ha reconocido, al igual que la educación mixta, la diferenciada "no es un modelo perfecto para todos los alumnos". "Debe ser una elección libre y personal de cada familia y de cada alumno", ha apostillado.
Por su parte, la moderadora del acto, la presidenta de la European Association Single Sex Education (EASSE) y profesora de Derecho Administrativo de la Universidad Carlos III de Madrid, María Calvo, ha defendido la "oportunidad" de debatir sobre este modelo de enseñanza en el sistema público español.
Asimismo, ha valorado la "unidad de criterio" que existe en Estados Unidos sobre el modelo educativo y ha señalado que los políticos son "mucho más prácticos" por apoyar un sistema que, según ha dicho, "da resultados".
Para Calvo, la situación que atraviesa el sistema educativo español, con casi un 30 por ciento de abandono escolar, unos resultados en PISA que revela una diferencia de hasta "39 puntos" entre chicos y chicas en 'comprensión lectora' o un 60% de alumnas que llegan a la universidad frente al 40% de alumnos, "es un buen momento para abrir la educación diferenciada al ámbito de lo público".