MADRID 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
La educación española es la peor adaptada a las necesidades de una economía competitiva de toda Europa, sólo por delante de Eslovaquia y Grecia, y obtiene un "estrepitoso suspenso" a nivel internacional, según la clasificación elaborada por el Instituto de Estudios Económicos (IEE) a partir del Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial, en la que España ocupa el puesto número 107 de un total de 139 países analizados.
El barómetro analiza la situación de la educación superior para evaluar si la educación ofrecida en un país se adapta a las exigencias de una economía competitiva de forma adecuada, extremo que se valora en una escala de uno al siete en la que Singapur, con una puntuación por encima de 6, ocupa el mejor puesto, seguida por Suiza, Islandia, Qatar y Canadá.
Finlandia, Bélgica, Suecia y Dinamarca son las naciones mejor clasificadas de la UE-27, al estar entre los diez primeros países, mientras que entre los veinte mejor posicionados aparecen también Irlanda, Chipre, los Países Bajos y Alemania como miembros de la Unión Europea.
En lugares no punteros pero buenos aparecen Malta, Austria, el Reino Unido, Francia, la República Checa y Luxemburgo. A partir de ahí, los países de la Unión Europea van bajando en la clasificación de modo que Italia, por ejemplo, ocupa el puesto 83, Rumanía está en el puesto 84 y Bulgaria en el 85.
"España suspende estrepitosamente en la adecuación de su sistema educativo a las exigencias que se derivan de una economía competitiva. Ocupamos el puesto 107 de un total de 139 países. En la Unión Europea sólo quedan por detrás de nosotros Eslovaquia y Grecia", explica el IEE.