MADRID 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, defiende que los decretos aprobados este viernes por el Consejo de Ministros para la reforma del sistema de Formación Profesional y la modificación del cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) no son "improvisados" ni se han presentado ahora pensando en un adelanto de las elecciones generales.
"Esto no es una medida ni de última hora, ni improvisada, sino algo que desde el primer momento entendimos que era necesario en las conversaciones del pacto educativo", ha argumentado el ministro en una entrevista a Europa Press. También ha explicado que el desarrollo de estos decretos tiene que ver con el desarrollo de la Ley de Economía Sostenible que se aprobó en marzo.
"Comprendo que pueda extrañar y que haya un legítimo interés en esto de las elecciones, pero le puedo asegurar que en este ministerio no pensamos en esto", ha aseverado Gabilondo, para añadir que él no tiene la vista puesta en comicios "sino en el curso académico" porque, según ha recordado, algunas de las medidas aprobadas pueden implantarse en el 2011-2012, aunque sean de obligado cumplimiento en el siguiente.
Asimismo, ha asegurado que una de las motivaciones para poner en marcha estas reformas es la reducción del porcentaje de alumnos que actualmente están en riesgo de abandonar el sistema educativo. "Hay más de un 30 por ciento que se encuentra en esta situación y queremos lograr que esto no ocurra y dar a estos jóvenes más oportunidades y caminos para que prosigan con su formación", ha explicado.
"Queremos que el sistema educativo sea más flexible para que los caminos no sean inexorables, que los chavales tengan más posibilidades, que haya menos riesgo de abandono y tengan más alicientes para continuar formándose", ha insistido el ministro, al timepo que ha subrayado que "el mensaje para la sociedad es fórmate lo más que puedas, no dejes nunca de formarte, la formación que adquieras se puede complementar con psterioridad, los caminos son permeables siempre en una dirección u otra", ha añadido.
En respuesta a las críticas que apuntan a la intención del Gobierno de ocultar las estadísticas de fracaso y abandono escolar mediante la expedición de certificados de competencias básicas a los alumnos que no obtengan el título de ESO, el titular de Educación ha defendido que su objetivo es "cambiar la realidad y, por tanto, las estadísticas, pero no maquillarlas".
Sobre la Reforma de la Formación Profesional, el ministro celebra que se vaya a acabar con la "rigidez" del sistema anterior, a través el diseño de pasarelas horizontales y verticales entre los ciclos formativos. "Hasta ahora, había que dar un paso atrás o volver al principio si se querían cursar otros estudios", ha indicado Gabilondo, que reconoce que "en muchos casos, era el sistema el que abandonaba a los chavales y no al revés".
NO ES PARTIDARIO DE IMPORTAR EL MODELO ALEMÁN DE FP
Gabilondo ha señalado además la necesidad de encontrar un tipo de formación que sea compatible con el ejercicio de alguna actividad profesional, pero ha advertido de que el modelo alemán, como el que va a implantar la Comunidad de Madrid --un tercio de clases teóricas y dos tercios de prácticas remuneradas-- sea el más adecuado.
"A nosotros, el sistema que nos gusta es el que tenemos. España no es exactamente Alemania", ha aseverado. "Lo que está claro es que para un momento determinado, en una determinada edad, puede ser oportuno hacer compatible la formación con el trabajo, pero no como modelo. Nos importa sobre todo que el tipo de plazas que tenemos responde al tipo de necesidades", ha argumentado.
Por último, ha reconocido que con esta reforma "no se acaba con el problema de la FP en este país". En este sentido, ha explicado que no se trata sólo de un tema educativo, sino también de una concepción social, pues ha recordado que mientras en Europa estudia FP dos tercios de los alumnos y un tercio bachillerato, "en España es al revés".