MADRID 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
El cambio climático ya es una "realidad evidente" en Europa, ya que en todo el continente los encargados de las políticas están comenzando a responder a los impactos actuales y futuros, así como a los riesgos asociados con el aumento de las temperaturas, los cambios en las precipitaciones, el deshielo de los glaciares, el hielo, la nieve, la subida del nivel del mar y la mayor frecuencia de inundaciones y sequías, según la directora ejecutiva de la Agencia Europea del Medio Ambiente, Jacqueline McGlade.
Durante la presentación de Climate Adapt, una nueva herramienta de formulación de políticas sobre la adaptación al clima de la Unión Europea, la directora de la AEMA ha destacado que la nueva página de Internet conjuga las extensas fuentes de información y proporciona el conocimiento base para informar a la población sobre adaptación. "Hay muchas oportunidades para los Estados miembro, empresas trasnacionales y regiones o municipios para aprender unos de otros y adoptar acciones relevantes en este sentido", ha añadido.
Sobre los efectos que ya son visibles del cambio climático en Europa, la Agencia Europea del Medio Ambiente precisa que en los países del sur de Europa está aumentando el riesgo de sufrir sequías y está disminuyendo la disponibilidad del agua, lo que se combina con la creciente demanda de este recurso por parte de la agricultura, el turismo y el uso residencia.
Además, añade que estos países también están experimentando una pérdida de biodiversidad, aumento de incendios forestales y de olas de calor, lo que está afectando a la salud humana y a una menor disponibilidad de agua para la energía hidroeléctrica y temperaturas más altas que afectan al turismo.
Respecto al Ártico, la institución asegura que se enfrenta a los mayores incrementos de temperatura y a un descenso de la capa de hielo mayor, lo que representa riesgos para la fauna. Asimismo, señala que hay riesgo potencial de que aumenten las explotaciones de petróleo y gas en la zona, así como del tráfico naviero en la región, con sus subsiguientes impactos ambientales asociados. Los países árticos consideran que la adaptación de la industria pesquera desplazará a las especies pesqueras hacia el norte.
Mientras, en el norte de Europa se observa menos nieve y capa de hielo en los ríos y lagos, así como un incremento en las inundaciones en invierno y primavera. Los planes de adaptación se centran en el riesgo de inundaciones, el incremento del potencial hidroeléctrico y el menor consumo de energía para la calefacción y el posible aumento del turismo durante el verano.
Por su parte, en el centro y este de Europa se están centrando en adaptarse a las temperaturas extremas junto con el descenso de las precipitaciones en verano y el incremento de la intensidad y frecuencia de las inundaciones en los ríos en invierno y primavera. Al mismo tiempo, los países alpinos se enfrentan a la pérdida de masa de los glaciares, que están reduciendo su cobertura de nieve, perjudicando el 'permafrost' debido a las menores precipitaciones de nieve que también conducen a un mayor potencial incremento de la frecuencia e intensidad de inudanciones y desprendimientos.
En este contexto, la comisaria europea de Acción por el Clima, Connie Hedegaard ha presentado la iniciativa junto con la ministra de medio ambiente de Dinamarca, Ia Auken, y la directora ejecutiva de la Agencia Europea del Medio Ambiente, Jacqueline McGlade.
Así, la iniciativa que han presentado incluye las potenciales opciones futuras de adaptación, metodologías y mapas sobre impactos, vulnerabilidad y riesgos sobre un conjunto de proyectos de investigación europeos. La plataforma (http://climate-adapt.eea.europa.eu) está pensada para dar apoyo a responsables políticos locales, regionales y europeos de cara a la formulación de medidas y políticas de adaptación al cambio climático.
La Plataforma se concentra en las siguientes áreas: cambio climático previsto en Europa; vulnerabilidad de las regiones, los países y los sectores en la actualidad y en el futuro; información sobre las actividades y estrategias de adaptación nacionales, regionales y transnacionales; estudios de casos de adaptación y de posibles opciones futuras de adaptación; herramientas en línea que apoyen la planificación de la adaptación; proyectos de investigación, documentos de orientación, fuentes de información, enlaces, noticias y eventos relacionados con la adaptación.
Para Hedegaard esta puede ser una "herramienta extraordinaria" para ayudar a los responsables políticos a optar por las mejores soluciones en beneficio de sus ciudadanos. "No somos demasiado buenos a la hora de compartir las mejores prácticas ni la información sobre lo que no se debe hacer. Esta nueva herramienta interactiva hará que nuestros esfuerzos sean mucho más eficientes", ha apostillado.
UNA NUEVA PROPUESTA EUROPEA PARA 2013
El portal CLIMATE-ADAPT apoyará la creación de la base de conocimientos necesaria para contribuir a la formulación de políticas de adaptación fundadas en datos comprobados. Su contribución servirá para elaborar una estrategia global de adaptación de la UE que la Comisión tiene la intención de adoptar a principios de 2013 con el fin de respaldar las necesidades de los Estados miembros, las organizaciones transnacionales y las partes interesadas locales con las medidas adecuadas a escala de la UE.
A la iniciativa se han sumado de forma voluntaria 25 países que han remitido su información sobre sus estrategias y planes nacionales, servicios climáticos y acciones prioritarias.