Un lince liberado este año en Toledo cruzó la Península Ibérica pero murió cerca de Oporto
MADRID, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
El número de atropellos de linces descendió en 2016, hasta los doce ejemplares, por segundo año consecutivo, al tiempo que las nuevas poblaciones han ido consolidándose por lo que los datos son positivos aunque están aún lejos de ser ideales, según WWF.
El técnico del programa de linces de WWF, Ramón Pérez de Ayala, ha señalado a Europa Press que en 2016 han muerto atropellados 12 linces; que en 2015 fueron 15 y en 2014 la cifra se elevó hasta 22 ejemplares muertos por este motivo y ha destacado también que a lo largo de 2016 se han reducido "bastante" los atropellos en puntos negros ya conocidos. "Es una buena noticia. Los nuevos atropellos se han producido en otros puntos dispersos y, además hay también cuatro poblaciones nuevas", ha celebrado.
Pérez de Ayala ha indicado que aún no se ha terminado el censo definitivo de 2016 pero prevé que se cierre con un nuevo aumento, ya que el año pasado la población total de linces ascendía a 404 ejemplares y nacieron 6 ejemplares, mientras que en 2016 se ha constatado el nacimiento de 36 cachorros, lo que supone "un buen augurio". Sin embargo, advierte que aunque parece que las principales poblaciones, las de Andujar y Doñana permanecerán estables, aún depende de como esté el problema de cría de conejos.
Sobre las nuevas poblaciones que se han reintroducido, el técnico de la ONG confía en que de momento "van bien", ya que "en todas" --Toledo, sur de Badajoz, Sierra Morena oriental y Portugal-- han nacido crías.
En total, de acuerdo con los datos de 2015, en Andujar hay 76 ejemplares; Guadalmellato, 61; Guarrizas, 48 linces y fuera de Andalucía había 43 individuos. La población que más ha crecido este año es la de Montes de Toledo, con 14 cachorros. "Este año se espera que serán muchos más", espera.
Asimismo, sobre los puntos negros ha indicado que el último atropello del año se registró en la A4, entre Bailén y Andujar, justo en el mismo lugar donde se han acumulado 12 atropellos desde 2012. Si bien, en este año "por lo menos" se han arreglado los vallados, ya que este tramo de Autovía no estaba vallada. "El Ministerio de Fomento ha cerrado la autovía, pero como organismo ha entrado en el Life+ Lince por lo que debe hacer en ese punto con urgencia un paso para fauna que aún no está hecho", ha comentado.
El experto considera que esa dejadez a la hora de acometer obras se extiende también a la consejería de Fomento de la Junta de Andalucía que han hecho obras menores como desbroces, mantenimiento de vallados o señalizaciones pero que no han acometido las grandes obras de pasos de fauna. "La consejería de Fomento debía haberlo hecho desde hace mucho tiempo porque tenía presupuesto desde 2012 y no ha ejecutado las obras", ha denunciado.
A pesar de que con estas obras menores se ha reducido la mortandad, advierte de que si no se construyen los pasos de fauna volverán a producirse atropellos en otros lugares, porque lo que se ha hecho de momento es cortar el paso, pero los linces "encontrarán la forma de pasar por algún sitio".
Sin embargo, valora de manera positiva la actitud "correcta" y la buena disposición del Ministerio y de la Consejería de Fomento a los que ve "conscientes de la gravedad del problema y de las soluciones" pero lamenta que "se atascan en la burocracia".
Con carácter general cree que esta especie amenazada por peligro de extinción, pero que ha dejado atrás en 2015 la categoría de "en peligro crítico de extinción" va "por el buen camino" ya que en los últimos quince años se ha cuadriplicado la población, que ha pasado de 100 a 400 ejemplares. "Lo más positivo es que hemos cogido inercia y que hemos logrado cambiar actitudes en muchas zonas", ha celebrado.
Entre los aspectos más preocupantes para la recuperación de la especie ve la situación de los conejos que sufren frecuentes enfermedades de difícil solución, como la maxitomatosis y la fiebre hemorrágico-vírica que diezman las poblaciones, ya que los atropellos son una cuestión de voluntad. Por ello, ha dicho que WWF está centrada en elaborar una Estrategia Nacional en coordinación con Portugal.
ACTUACIONES PARA 2017
De cara a 2017, la ONG busca reforzar las cuatro nuevas poblaciones y las dos ya estables en Andalucía de modo que hasta que no se asienten estos grupos no contempla hacer nuevas reintroducciones en otras zonas porque es "importante" que al principio haya "muchos individuos" para garantizar el éxito de la supervivencia y para mejorar la diversidad genética.
Sin embargo, en el futuro que no llegará antes de 2019 se podría ampliar el área de distribución del lince ibérico ya que el técnico ha indicado que está estudiando otras zonas, una en Extremadura, en el río Ortiga y otra en Granada aunque estima que "sería interesante" empezar a trabajar también en Castilla y León y en Madrid.
Pérez de Ayala ha relatado como uno de los dos linces liberados en los Montes de Toledo ha recorrido una gran distancia, hasta 3.000 kilómetros, ya que atravesó Madrid, Soria, Burgos, Zamora, León, regresó a Zamora a la zona de Benavente y desde ahí a Portugal. Después su collar GPS dejó de emitir y hace dos meses apareció atropellado en las afueras de Oporto.
Otro de los dos linces liberados en Montes de Toledo hizo "algo parecido" y cruzó hasta el norte de Portugal y bajó hasta el Algarve, cerca de la zona de introducción del país vecino y su emisor ha dejado de emitir, de modo que se desconoce donde está.
Si bien, apunta que estos son dos casos excepcionales ya que solo otros dos linces han recorrido distancias tan grandes en los últimos 15 años.
Entre las situaciones excepcionales de 2016, ha subrayado un "caso dramático" pues han confirmado "la sospecha" de que un macho ha desplazado a otro y ha matado a su camada de cuatro crías.
LINCES EN TODA ESPAÑA
Pese a todo, considera que la evolución del lince es "muy positiva" y va por "buen camino" y la lucha de este año de WWF será conseguir financiación para seguir trabajando y lograr así la recuperación total de la especie.
Según la Unión Internacional de Conservación de la Naturaleza (UICN) para confirmar que la especie está fuera de la amenaza se necesitarían 2.000 individuos maduros, 1.000 de ellas hembras reproductoras. "Eso significa que habrá que multiplicar por diez la población, pues ahora hay 120 hembras reproductoras", advierte.
El técnico ha indicado que la Península Ibérica tiene habitat potencial para albergar estas poblaciones y las zonas "potencialmente buenas" además de la mitad suroccidental podrían estar en el valle del Ebro. "La idea es trabajar en su distribución histórica e ir avanzando hacia el norte pero logrando conectar las zonas actuales", comenta.