MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Nueva Cultura del Agua ha presentado un documento en el que plantea una serie de propuestas a incluir en el Pacto Nacional del Agua, entre las insta a prohibir las cesiones de agua entre particulares, que para la entidad es una "mercantilización" del recurso, así como una gestión más transparente, participativa y un control estricto de los usos hídricos.
En un documento que ha elaborado la fundación y que se ha remitido al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, entre las propuestas que considera necesarias para alcanzar un buen Pacto Nacional del Agua, apuesta por derogar las reformas legislativas que "han abierto el paso a la mercantilización de los derechos concesionales".
Además, plantea la importancia de establecer hojas de ruta hacia la sostenibilidad en las demarcaciones que soportan trasvases y en los territorios beneficiarios de los mismos, así como en los territorios donde están planteadas obras hidráulicas.
Asimismo, insiste en que se debe promover una gestión pública, transparente y participativa del agua urbana; recuperar el buen estado ecológico de ríos, riberas, lagunas, humedales, manantiales y otros ecosistemas asociados, así como paisajes de identidad territorial y disfrute social y aplicar soluciones eficaces y sostenibles frente a las inundaciones.
La propuesta de la fundación plantea una mayor participación pública "real y activa" y que el futuro pacto nacional del agua esté centrado en la gestión de la demanda, la recuperación del buen estado de los ríos y ecosistemas acuáticos, así como una gestión sostenible del agua que esté adaptada al cambio climático y que se base en el conocimiento, la transparencia y la participación activa de la sociedad.
El documento señala como otros requisitos "fundamentales" la necesidad de un programa de trabajo con calendario y procedimientos, metodología de participación, que especifique los resultados de la participación, la transparencia de todo el proceso y los procedimientos que se seguirán hasta la decisión final.
En su opinión, el Ministerio debe evitar una participación "aparente e ineficaz" y considera necesario alinear la política de aguas a los objetivos ambientales de la Directiva Marco del Agua y a la adaptación al cambio climático.
También requiere una gestión más transparente, medidas de gestión de la demanda, un control estricto de las captaciones de agua y de las actuaciones en el Dominio Público Hidráulico.
En definitiva, la Fundación Nueva Cultura del Agua insta a realizar una transición hacia una política del agua inspirada en la Directiva Marco que permita recuperar el retraso de casi una década en conseguir el buen estado de las aguas y ecosistemas asociados y lograr una adaptación a los impactos del cambio climático, cada vez más evidentes.