VALENCIA 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los trabajos de recuperación de las más de 50.000 hectáreas arrasadas en a Comunidad Valenciana por los incendios originados en las localidades de Cortes de Pallás y Andilla comenzarán a partir de septiembre con el fin de " regenerar una zona de alto valor paisajístico y ecológico, y que supone uno de los grandes atractivos turísticos de las comarcas de los Serranos y el Valle de Cofrentes".
Así lo ha explicado la consejera de Territorio y Vivienda, Isabel Bonig, que ha pormenorizado en el programa 'Bon matí' de Ràdio Nou cómo serán las primeras acciones sobre el terreno, ha informado la radio autonómica en un comunicado.
Así, lo primero será la tala de madera de los árboles quemados, restablecer las pistas forestales, emprender actuaciones para evitar la aparición de plagas y luchar contra la erosión con la aplicación de fajas naturales. Bonig ha asegurado que estas actividades se complementarán con la reforestación, prevista para comienzo del año que viene.
Los trabajos los ejecutarán los empleados de Tragsa y Vaersa. Estas empresas públicas, además, han previsto contratar vecinos de estas comarcas para que colaboren en la restauración de los bosques con los cuales han convivido desde que nacieron.
CAMBIO EN CINCO AÑOS
La consejera ha señalado que los técnicos confían que a corto plazo, en unos cinco años, el paisaje renegrido que ofrecen ahora las zonas forestales afectadas comience a cambiar.
La consejera ha repasado otras áreas de gestión de su departamento. Entre otros, la reforma de la Ley de Ordenación del Territorio y Protección del Paisaje (LOTPP), un cambio normativo, ha dicho, con el que la Comunitat Valenciana "se convertirá en la primera comunidad que incorporará criterios medioambientales y urbanísticos, y que hará más ágil el proceso urbanizador".
Bonig ha detallado que con la aprobación de la nueva LOTPP se resolverá la hipertrofia de antes refundiendo los 1.300 artículos contenidos en diversas leyes para quedarse con 267. La responsable de Territorio ha añadido que transformarán cinco leyes y dos reglamentos en uno. Como ejemplo de los retrasos que generaba la actual normativa ha calculado en 4.000 los expedientes que aún están en fase de tramitación.
La consejera ha avanzado que la nueva norma "pondrá fin a la etapa expansiva que favorecieron las anteriores" y pronostica un período de "menos reclasificaciones de suelo para abrir otra dedicada a rehabilitar y a construir en suelo ya catalogado".