MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
La directora de la oficina española de Cambio Climático, Susana Magro, ha anunciado que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente está ultimando un Real Decreto para regular el cálculo, reducción y compensación de la huella de carbono en las empresas, que espera que sea aprobado por el Consejo de Ministros después de la Cumbre del Clima que se celebra en Varsovia y, en todo caso, antes de final de año.
Durante su participación en la entrega del I Premio Periodístico de la Plataforma de Empresas por la Eficiencia Energética, Magro ha explicado que el objetivo es que las empresas que deseen compensar su huella de carbono lo hagan a través de la adquisición de unidades de absorción de origen nacional. Asimismo, se pondrá en marcha un registro nacional para que todas las empresas que calculen su huella de carbono puedan registrarla oficialmente.
Además, este registro nacional incorporará proyectos que sirvan para compensar emisiones. "Se trata de una novedad histórica", ha valorado Magro que ha detallado que este registro estará a disposición de las empresas para que puedan compensar sus emisiones con proyectos dentro de España.
Respecto al cumplimiento de país del Protocolo de Kioto, ha reconocido que para llegar al objetivo, "desgraciadamente" se ha tenido que recurrir a la compra de derechos de emisión fuera de España y ha añadido que "quizá no había otro camino" en unos años de crecimiento económico. En todo caso, considera que "no parece lógico" gastar cerca de 800 millones de euros en compensar emisiones furea del país.
Por eso, ha dicho que "hay que cambiar esta política" y que está "decidida a ello" y que la idea del ejecutivo es cumplir con los compromisos internacionales de cambio climático pero no por la vía de la compra sino por la reducción de emisiones de CO2.
Susana Magro ha destacado que la lucha contra el cambio climático y el uso eficiente y sostenible de los recursos naturales, así como el fomento del ahorro, la eficiencia energética y las energías limpias, son claves para afrontar con éxito la transformación hacia una economía mundial baja en carbono.