BRUSELAS, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha lanzado este jueves un ultimátum a España para que tome medidas para proteger el Parque Nacional de Doñana del deterioro que se está produciendo en sus hábitat naturales por la actividad turística y el regadío.
La advertencia tiene la forma de un dictamen motivado, segunda fase de un procedimiento de infracción, que da dos meses al Gobierno para que corrija la situación o Bruselas podrá llevar el caso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
En su decisión, la Comisión alerta de la sobreexplotación de los acuíferos del parque nacional, que achaca a "las intensas labores de regadío y la demanda de las instalaciones turísticas".
Bruselas recuerda que Doñana alberga varios lugares de la red Natura 2000, protegida por la directiva sobre Hábitat que "no excluye las actividades humanas" en estos espacios, pero sí obliga a los Estados miembros a "tomar medidas" para evitar su deterioro.
También considera que las autoridades españolas han incumplido sus obligaciones con respecto a la directiva del Agua, con lo que "impide la gestión sostenible de los recursos hídricos" en la comarca de Doñana.
En su análisis, el Ejecutivo comunitario ha recalcado que el parque acoge una biodiversidad "única en Europa", caracterizada por una gran variedad de ecosistemas que constituyen el hábitat de algunas especies "en grave peligro de extinción", como el águila imperial española o el lince ibérico, y ofrece refugio a miles de aves migratorias.
Bruselas envió en octubre de 2014 una primera carta de emplazamiento instando al Gobierno a corregir las deficiencias detectadas, pero "persisten los incumplimientos", por lo que ha decidido dar el último paso antes de acudir a la justicia europea.