El campamento de Zaatari (Jordania) sufre una nueva oleada de refugiados sirios con hasta 1.200 registros al día

Refugiado del campamento Zaatari (Jordania)
EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 25 diciembre 2012 12:03

AMMÁN (JORDANIA) 25 (del enviado especial de Europa Press, Sergio Alonso)

El campamento de Zaatari, al norte de Jordania, ha sufrido durante la víspera de la fiesta de Navidad una nueva oleada de refugiados sirios, con hasta 1.200 registros al día, de los que cerca del 45 por ciento son niños que se encuentran sin escolarizar. En la actualidad, el campo está ocupado por unas 50.000 personas, que han escapado del conflicto en Siria a través de la frontera y se espera que la cifra aumente hasta los 75.000 desplazados (sólo en Zaatari) en los próximos meses.

Así lo ha puesto de manifiesto, en declaraciones a Europa Press, uno de los responsables de organización del campamento de acogida, Fare'e Al-Mesaeed, quien reconoce que "las tiendas en las que se alojan las familias sirias no están preparadas para aguantar las bajas temperaturas del invierno o las fuertes lluvias que se han registrado los últimos días". Por ello, se están habilitando cerca de 3.500 casas prefabricadas que irán destinadas a familias en las que sólo esté la madre a cargo de los hijos. Además, estas caravanas, que serán financiadas gracias a la cooperación internacional, pasarán a ser propiedad de las familias sirias, que podrán llevárselas a su país cuando acabe la guerra civil.

El presidente de la ONG Mensajeros de la Paz, el Padre Ángel, que ha viajado al campamento de Zaatari para conocer en primera persona la realidad que se vive en la zona, ha explicado que las personas que se encuentran en este alojamiento provisional son "los más pobres e indefensos de toda Siria".

En concreto, durante este recorrido por el campamento, una mujer embarazada con dos hijos pequeños, ha insistido en la situación "desesperada" a la que se enfrentan cada día. Apenas hay mantas para repartir y se queja de que ha tenido que ver como una rata mordía de noche a uno de sus niños a causa de la suciedad que se acumula en la zona.

Mientras, los centros de reparto de alimentos están siempre llenos y se esperan colas de hasta una hora para poder recibir las raciones diarias, que deben ser preparadas en alguna de las cocinas que se encuentran distribuidas en esta ciudad cubierta de lonas.

El padre Ángel ha lamentado que después de 2.000 años siga siendo una realidad "que haya niños que no tienen dónde nacer y crecer". "Más que estampas de Navidad nos hemos encontrado con estampas de la insensatez de los políticos, que no son capaces de dialogar y que provocan que miles de personas tengan que huir de su propio país por miedo", ha sentenciado. En cualquier caso, ha señalado que "un mundo mejor es posible dentro de esa visión tan penosa".

Así, el presidente de Mensajeros de la Paz destaca que, pese a la crisis, "hay más solidaridad que nunca en el pueblo español". En este sentido, el padre Ángel ha sentenciado que "no se puede olvidar a otros países donde hay muchos niños de Jesús rotos". Jordania es uno de esos lugares, donde confluyen refugiados sirios, palestinos e iraquíes, en una zona de constantes conflictos políticos.

MANTAS, COMIDA, JUGUETES...

Con motivo del viaje del padre Ángel a Ammán, la capital del país, se ha llevado a cabo un acto de entrega de material humanitario que ha sido coordinado por el director de Mensajeros de la Paz en Jordania, el padre Carlos Ja'ar. Cerca de cincuenta familias iraquíes y sirias han recibido en la sede de la organización mantas, comida y juguetes. De la misma forma, desde la ONG se está coordinando la entrega de una ambulancia, una clínica móvil, así como la compra de casas prefabricadas, para atender a las familias alojadas en el campamento de Zaatari.

El padre Carlos Ja'ar forma parte de la comisión general de organización de este campamento de refugiados, que opera bajo el paraguas de la 'Jordan Hashemite Charity Organization', y conoce las peticiones prioritarias del gobierno jordano al respecto. "En primer lugar se pide que se realoje a la gente en las caravanas en lugar de en las tiendas", ha explicado, a la vez que insistía en la preocupación por el posible contagio de enfermedades y por la necesidad de conseguir más alimentos y mantas.

Finalmente, Mensajeros de la Paz está poniendo en marcha el proyecto 'Quiero irme a casa', una campaña de sensibilización que se llevará a cabo, en primer lugar, en Asturias. El objetivo del mismo es acercar a los jóvenes del Principado la realidad y las necesidades de los habitantes de los campos de refugiados de Jordania a través de material didáctico audiovisual. Para ello, estará dirigido al profesorado de secundaria como una alternativa pedagógica con la que abordar las violaciones de Derechos Humanos, una de las principales causas del éxodo.