"Si cuando se quiere, se puede, que se pueda siempre", dice Paloma Favieres
MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La responsable del área Jurídica de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Paloma Favieres, insta al Ministerio del Interior a mostrar la misma diligencia que ha expresado en el caso del refugiado sirio zancadilleado en Hungría y recién llegado a España con los "cientos" de solicitantes de asilo que se encuentran ya en el país en lista de espera porque "la ley debe ser igual para todos".
En declaraciones a Europa Press, se refería así al hecho de que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, haya avanzado que su departamento no va a poner "ningún obstáculo" a la tramitación del asilo de esta persona y va a "hacer todo lo posible para que su situación, extraordinaria, pueda estar legalizada lo antes posible".
"Lo que ponen de manifiesto estas declaraciones es que cuando hay voluntad de agilizar los procedimientos y cumplir los plazos que dicta la ley, puede hacerse. Hagamos que si cuando se quiere se puede, se quiera siempre. Que se pongan todos los mecanismos para que este trato preferente no sea una situación puntual, que tengamos todas las garantías y medios humanos para que esto no tenga que ser algo excepcional", afirma.
Favieres explica que "la ley tiene un procedimiento y a lo que tiene que tender la Administración es a garantizar que todas las personas que se encuentran en situación de necesidad de protección internacional como este señor puedan acceder en condiciones justas a un procedimiento", algo que a juicio de CEAR, "hoy por hoy, no se está dando".
Según afirma, en el caso de Madrid, donde el sirio Osama Abdul Mohsen y dos de sus hijos han sido acogidos por mediación de una escuela privada de entrenadores de fútbol, "hay cuatro meses de espera" para conseguir la primera cita en la que formalizar la solicitud de asilo, por lo que "en circunstancias normales, esta persona no podría acceder al procedimiento hasta el mes de enero, como muchos otros".
Una vez iniciado el expediente y admitida a trámite la petición, la resolución final de concesión o denegación debe llegar, conforme dicta la ley, en un plazo no superior a seis meses, pero según Favieres, depende de la nacionalidad del afectado. "Los sirios suelen ir algo más rápido, pero en general se llega a esperar un año o más", apunta.
Mientras se prolonga la resolución, el solicitante recibe una tarjeta que acredita su condición y que expresamente, recoge la autorización para residir en España pero no para trabajar. Sólo si la decisión de la Administración tarda en llegar más de medio año, el afectado recibe permiso para acceder a un empleo al renovar su carné.
"No sabemos con exactitud el número de personas que hay en espera para llegar a esta fase, pero se calcula que son varios centenares. Interior, más allá de casos puntuales, debe garantizar el acceso al procedimiento y su tramitación para todas las personas que se encuentran en necesidad de protección internacional, acabar con el retraso en las citas para formalizar la solicitud, que los tiempos de instrucción de expedientes sean adecuados y que la gente pueda acceder a los recursos de manera inmediata", ha sentenciado.