Comunión y Liberación recuerda la importancia del cristianismo que "ha hecho grande a Europa" ante las elecciones

Actualizado: lunes, 19 mayo 2014 19:37

MADRID 19 May. (EUROPA PRESS) -

Comunión y Liberación recuerda la contribución fundamental que puede aportar a la vida pública la fe, "ampliando la razón", y la aportación del cristianismo que "ha construido y hecho grande a Europa", con motivo de las elecciones europeas que tendrán lugar este domingo.

"La aportación del cristianismo es ante todo una educación que permita mirar la realidad en todos sus factores, y por tanto recuperar ese ímpetu ideal originario que se ha oscurecido con el tiempo. Esta es la verdadera emergencia actual", apunta el movimiento.

Además, señala que, si Europa "no es sorda a tal reclamo" podrá "renacer y de este modo volver a ser el nuevo mundo, ejemplo y modelo para todos". "La contribución que una cultura europea renacida puede ofrecer a todo el mundo es volver a poner en el centro la pregunta sobre qué permite que un ser humano sea y se sienta como tal", subraya.

Según destaca Comunión y Liberación, Europa nació y creció en torno a algunos "grandes elementos" que han marcado la historia del mundo y que "documentan el alcance que tiene la fe cristiana para la vida de los hombres" como son: el valor de la persona, del trabajo, de la materia, del progreso y de la libertad.

Por ello, en vísperas de las elecciones europeas del 25 de mayo, cuando "la opinión pública parece dividida entre quienes defienden salir de la Unión Europea y quienes consideran inútil acudir a votar porque el voto, de hecho, no cambiará nada", invitan a preguntarse si no es la ocasión para "recuperar una actitud positiva y darse la oportunidad de un cambio".

Asimismo, se refieren a la crisis para apuntar que esta ofrece una "gran posibilidad" a los europeos, la de "reconquistar las razones de su existir comunitariamente", a su juicio, "un desafío inderogable".

Los autores del manifiesto precisan que en la actualidad crece una idea de Europa como "un espacio cultural y político relativista, cuyas estructuras tratan de hacer lícita e incluso fuente de derecho cualquier aspiración individual desligada del problema de qué es la persona humana" y se preguntan si esta no sería una razón para quienes quieren abandonar la Unión Europea.

Sin embargo, puntualizan que existe una vía de salida, "volver a partir de la posición que generó Europa y la Europa unida" pues "los intereses económicos no bastan por sí solos para volver a partir" sino que "hace falta redescubrir que el otro es un bien para la plenitud del yo y no un obstáculo".

Así, apuestan por una Europa que no tenga que cerrarse a la inmigración, que no practique sólo austeridad en economía sino también solidaridad, que no se repliegue sobre "nacionalismos faltos de realismo y anti históricos", que no abogue por "una legislación dirigida a romper todos los vínculos, cultivando la obsesión por los nuevos derechos de los individuos" y que no avale "la hostilidad hacia los credos religiosos, y en particular hacia la religión cristiana, traicionando precisamente lo que ha construido y hecho grande a Europa en la historia".