Dice que a Zapatero "lo machacaron" cuando dijo que tenía que ajustar pese a hacerlo con matices y no tocando las zonas más sensibles".
MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
El expresidente del Gobierno, Felipe González, ha apostado este jueves por "acabar con las políticas de austericidio en las que se está metiendo Europa" para afrontar la crisis al entender que "no conducen a nada" pese a llevar "tres o cuatro años insistiendo en las mismas".
"Una vez que se mete la pata y se es consciente de que se ha metido, hay que sacarla rápidamente y cambiar la política", ha asegurado el dirigente socialista en una entrevista en el programa 'Espejo público' de Antena 3 recogida por Europa Press al ser preguntado por las alternativas del Gobierno español.
En este sentido, ha recordado que Estados Unidos tiene más deuda y más déficit que Europa y "hace una política monetaria más expansiva y la economía crece al 2 por ciento". En su opinión, el error de la zona euro es "confundir el problema de deuda con un problema de solvencia cuando no se es insolvente".
Ante esta situación, González ha criticado que el Gobierno apele a la herencia recibida ya que "cuando se lleva más de un año gobernando uno es heredero de si mismo". Igualmente ha criticado que el ejecutivo de Mariano Rajoy insista en decir que es Europa la que impone sus políticas. "Yo quiero ver que el Gobierno español se oponga en el Consejo Europeo a aquellas resoluciones con las que no esté de acuerdo y que conste en las mismas", ha añadido.
"A ZAPATERO LE MACHACARON"
En cuanto a los recortes que aprobó el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero en 2010 y que Felipe González apoyó, el expresidente del Gobierno recordó que a Zapatero "lo machacaron" cuando dijo que se "había agotado el margen de sus políticas y que tenía que ajustar pese a haberlo hecho con matices y no tocando las zonas más sensibles". Para González, el actual Gobierno "hace lo contrario de lo que dijo que iba a hacer y está arrasando con todo".
El político socialista admitió que la crisis "está tocando fondo", pero ha expresado su preocupación por "cuánto tiempo se va a estar en el fondo".
En cuanto al supuesto desmantelamiento del estado de bienestar, González se ha mostrado confiado en "poder recomponerlo" y ha precisado que "no es lo mismo privatizar que concertar con hospitales".
"El sistema nacional de salud se creó con muchas menos posibilidades económicas que las actuales y funcionaba y ahora cuando veo que se está desmantelando pienso que con una mayoría absoluta se pueden tomar este tipo de decisiones pero cuando se acabe se revertirá ese proceso", ha indicado.
González se ha mostrado además seguro de la bondad del sistema sanitario español y ha recordado que "nunca se ha demostrado que una gestión privada de un servicio público como la salud sea más barata ni más eficiente que la pública".
El ex presidente del Gobierno ha asegurado que por primera vez en su vida siente "que se le ha despojado de algo que ha contribuido a crear" y entiende que "la gente no quiera que le arrebaten" algo que se empezó a crear hace 30 años como el sistema público de salud o el de educación.
Ante este situación, y al ser preguntado sobre si ha planteado irse del país, ha admitido que ha llegado a preguntarse por qué no poner una distancia "de 6.000 kilómetros " para no ver informaciones negativas cada mañana que le hacen "sufrir". Pero González asegura mantener "la rebeldía" consigo mismo que le hace "rebelarse contra aquello que es injusto".
En cuanto a la emigración de jóvenes, Felipe González ha admitido esa opción como algo real porque los españoles tienen que "tener iniciativa para arrancar por sí mismos y no pueden esperar la cantinela de la política de que lo peor ha pasado". En este sentido, ha reconocido que "una opción es salir incluso con la esperanza de volver; la emigración puede ser circular".