MADRID 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Francisco Javier Aspas emprende en su último libro, 'La casa del bosque de Marbach' (LibrosLibres), un viaje al interior de las maternidades Lebensborn, creadas por los nazis con el objetivo de dotar de futuros líderes al régimen nacionalsocialista, en el marco de un programa de regeneración racial del pueblo alemán.
En declaraciones a Europa Press, Aspas ha explicado que para escribir este libro accedió a cerca de 200 testimonios de jóvenes que pasaron por estos centros, mujeres que entraron de forma voluntaria para ofrecer su hijo a Hitler. No obstante, ha precisado que a estas maternidades también entraron esposas de oficiales de las SS así como mujeres que habían quedado embarazadas en relaciones ilegítimas con oficiales de las SS a los que se obligaba a tener cuatro hijos dentro o fuera del matrimonio.
"Lebersborn fue un programa al que envolvió mucha bruma tanto en el Tercer Reich como incluso después. Incluso en Núrenberg fue un tema delicado que no se quiso investigar hasta el fondo. Ha sido siempre un tema que se ha considerado muy molesto", ha precisado.
En esas maternidades nacieron aproximadamente 20.000 niños, entre ellos, la cantante del grupo Abba Frida Lyngstad que contó cómo ella y su madre tuvieron que huir de su Noruega natal a Suecia para escapar de la persecución y las humillaciones a las que fueron sometidas.
Según apunta el autor, una de las cosas que más le sorprendió de los testimonios de estas mujeres en comparación con los de las juventudes hitlerianas fue que, mientras en estos últimos, el fanatismo era "ciego", en los de las jóvenes encontró "dudas", pues las jóvenes se preguntaban en algún momento si eso estaría mal "a los ojos de Dios".
La novela recrea este episodio de la historia a través del personaje de una joven llamada Hedda Weiss que una gélida noche de diciembre de 1941 ingresa en uno de estos centros, en un remoto lugar de Prusia oriental, una casa rodeada por un siniestro bosque.
Ella es sólo una de las miles de chicas que durante el Tercer Reich ingresaron en estos centros que formaban parte del programa racial nazi con la única intención de ofrecerle un hijo al Führer, pero durante su estancia se debatirá entre la fascinación del nacionalsocialismo y el terror provocado por este régimen.
En la actualidad, muchos de los niños Lebensborn se han unido en la asociación Lebensspuren (Huellas de Vida) para ayudarse en la búsqueda de sus orígenes y solicitar que se les restituya como víctimas del nacionalsocialismo.
En la novela, Aspas también aborda otros programas llevados a cabo por el régimen nacionalsocialista como la práctica de abortos en el caso de las mujeres no arias; el programa de eutanasia; así como el tema de la manipulación del lenguaje cuando hablaban de "muerte por compasión" o de "solución final".