MADRID 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Centro de Acústica Aplicada y Evaluación No Destructiva (CAEND), un centro mixto de la Universidad Politécnica de Madrid y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han elaborado un método para elaborar mapas de ruido de mayor calidad y a un menor coste, que ha sido publicado en la revista científica 'Applied Acoustics' en su número especial 'Noise Mapping', según ha informado la UPM.
Con la aplicación de este método se podrá reducir "considerablemente" la incertidumbre asociada y disminuir los costes computacionales en el proceso de generación de mapas, mediante técnicas de interpolación espacial.
Tras la aprobación de la Directiva Europea del ruido en 2002, es obligatorio que las ciudades e infraestructuras del transporte más importantes deban realizar mapas de ruido como una herramienta fundamental de diagnosis en la lucha contra el ruido ambiental.
Los mapas de ruido se elaboran habitualmente mediante herramientas de simulación ya que, a diferencia de las medidas, estas permiten ampliar la extensión espacial y temporal evaluada, permitiendo cubrir objetivos más ambiciosos con unos costes abordables por la administración.
Con estas herramientas se puede calcular el nivel sonoro en puntos discretos de un mapa que componen la rejilla de cálculo. A continuación, se utilizan herramientas de interpolación espacial para dibujar un mapa completo que permite obtener líneas isofónicas. Dado que el proceso de interpolación no se realiza con criterios acústicos, dicho proceso origina errores que incrementan la incertidumbre del mapa.
Para mejorar la calidad del mapa se hacen rejillas muy densas, con puntos muy próximos, de forma que la aportación a la incertidumbre del proceso de interpolación quede minimizada. Sin embargo, a medida que la rejilla de cálculo gana en resolución, los costes computacionales se disparan.
Con las nuevas rejillas autoadaptativas se puede mejorar la calidad del mapa y reducir los costes computacionales "enormemente", según los investigadores, que explican que estas rejillas se generan a través de un proceso iterativo que permite centrar los cálculos acústicos en aquellas posiciones que son de interés, evitando los puntos que proporcionan información redundante.
El procedimiento puede ser aplicado por una parte a la optimización de tiempos, ya que permite reducir enormemente el número de posiciones en las que realizan los cálculos acústicos (dependiendo de los casos hasta en una relación de 1:100 o incluso superior). Pero además, la metodología también puede ser aplicada sobre un mapa ya existente para su optimización ya que, con un sobrecoste computacional menor del 10 por ciento, por lo que puede llegar a reducir la incertidumbre de interpolación a la mitad.