MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
La primer ola de calor del verano se mantendrá hasta el jueves y el viernes, cuando las temperaturas darán un respiro, aunque de cara al fin de semana volverán a subir aunque no tanto como estos días, según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), que señala que este martes los termómetros bajarán en la mitad oeste y subirán en la mitad este peninsular.
Así, el jefe de predicción de la AEMET, Ángel Alcázar, ha señalado que en Madrid se han superado "todos los registros para un mes de junio de la serie histórica que comenzó en 1920", ya que este domingo se llegó a 39,1 grados centígrados. En Toledo, el domingo se alcanzaron 40,7 grados centígrados, lo que iguala la máxima de junio del 30 de junio de 1994 y el 26 de junio de 2012. "Son valores muy altos para un mes de junio", ha valorado.
Además, ha indicado que se han superado las temperaturas del periodo de referencia 1981-2010 pero no han sido récord, en Alicante, que, con 36,7 grados centígrados se iguala la máxima de 2005, aunque en 2012 (fuera del periodo) se llegó a 38,4 grados centígrados.
Este domingo, en Córdoba aeropuerto el mercurio registró 43,7 grados centígrados, una décima más que los 43,6 grados de junio en el año 81, pero no supera el récord de 45 grados de temperatura de 1965. En Jaén se llegó este domingo a 39,7 grados centígrados, un valor superior a la máxima del periodo de referencia, que fueron los 39,2 grados centígrados de junio en 2010, aunque fuera de ese intervalo, en junio de 2012 se llegó a 42,5 grados centígrados.
En Salamanca, este domingo se superó en cuatro décimas, con 37,4 grados centígrados el máximo del periodo de referencia de 2001. Sin embargo, en 2012 se alcanzaron los 39,1 grados centígrados.
Tras las elevadas temperaturas del fin de semana, Alcázar ha indicado que este lunes hay aviso de riesgo extremo (rojo) en Córdoba, donde se prevén 44 grados centígrados de máxima.
En cuanto a la evolución, el meteorólogo ha explicado que a partir del martes comenzará a cambiar la situación estable de estos días pasados, en los que "apenas" había viento. Sin embargo, a partir de este martes soplará el viento de sur y aliviará la situación en la mitad occidental peninsular, de modo que cesarán los avisos por temperaturas en Huelva, Cádiz o Sevilla. En cambio, el flujo de sur elevará los termómetros en la mitad este peninsular.
Así, ha adelantado que el flujo de sur hará que en el País Vasco alcancen a 39 grados en el interior de Vizcaya y 37 grados centígrados en la zona costera, y que en el valle del Ebro tendrán 41 grados centígrados. Mientras, los termómetros marcarán unos 39 o 40 grados este martes en Madrid y Castilla-La Mancha; unos 38 o 39 grados centígrados en Valladolid y mitad este y "se quedarán" en unos 36 grados en el resto de Castilla y León.
Respecto a Galicia, ha apuntado que "está al margen" de esta situación aunque se espera algún aviso en Orense, donde se prevén entre 35 y 36 grados centígrados.
EL MIÉRCOLES LLEGA EL ALIVIO
De cara al miércoles, empezarán a bajar ligeramente las temperaturas y únicamente quedarán avisos naranjas por temperaturas altas en el valle del Ebro y en Navarra y con nivel amarillo en la parte más oriental de Madrid, Castilla-La Mancha y Andalucía.
Sobre los próximos días, ha dicho que a pesar de que el flujo predominante será de sur los termómetros bajarán el jueves y el viernes de modo que en la mitad occidental tendrán "temperaturas normales" mientras que aún seguirán "algo más altas de lo normal en la mitad este".
"Serán más altas cuanto más al norte", ha advertido Alcázar que cree que el jueves y el viernes descenderán y podría haber alguna tormenta en el Cantábrico.
De cara al fin de semana, los modelos indican que los termómetros "se volverán a recuperar, aunque no parece que se vayan a alcanzar los valores tan feroces de días pasados".
"Todo apunta a que la situación es persistente porque parece que volverá a hacer calor y, aunque no parece que sea una ola de calor como la primera, sí sería muy llamativo que fueran de la misma entidad y tan seguidas. Hemos pasado al verano de golpe", ha comentado.
Respecto a las mínimas, el portavoz ha añadido que también han sido muy altas y ha advertido que el cambio brusco es el que se producirá en el País Vasco este lunes, donde la máxima del domingo será como la mínima de la próxima madrugada y "se van a parecer mucho".
Finalmente, sobre la anomalía de temperatura, ha manifestado que considerando que la media de julio en el centro peninsular es aproximadamente de 34 grados centígrado, las máximas están siendo entre 7 y 8 grados centígrados por encima de lo que es normal para estas fechas del año.