Pontificado.- Compañeros jesuitas en Alcalá destacan al cercanía, austeridad y la espiritualidad del Papa Francisco

Actualizado: jueves, 14 marzo 2013 13:35

MADRID 14 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Papa Francisco es una persona "tímida, cercana, sencilla, amable, muy austera, muy buen compañero, muy tratable, no se hacía notar y era muy espiritual", según recuerda el jesuita Jesús María Alemany, que fue compañero de José María Bergoglio durante su estancia en la casa de Alcalá de Henares (Madrid).

Alemany, profesor emérito de la Universidad Pontificia de Comillas, ha explicado que en esta residencia el nuevo Papa realizó el periodo de 'Tercera Probación', que se realiza aproximadamente unos quince años después de haber ingresado en la Compañía de Jesús. Se trata de una prueba, que es una experiencia parecida a la del noviciado y que dura entre seis y nueve meses. En ese periodo, según ha añadido se propicia una "profunda experiencia de encuentro con el Señor y se renueva la vigencia de "la llamada a vivir y morir en la Compañía, sirviendo al Señor en la ayuda del prójimo".

En esa prueba, la Compañía de Jesús evalúa, por última vez, la "aptitud del sujeto" para ser admitido definitivamente en ella. Alemany recuerda que hizo la Tercera probación con él durante el último trimestre de 1970 y que su instructor era el Padre José Arroyo S.J.

"Éramos unos 30 jesuitas que hacíamos el mes de ejercicios, nos dábamos un tiempo para profundizar en la espiritualidad ignaciana, recordar las claves de la Compañía de Jesús", ha rememorado, al tiempo que ha destacado que hicieron algunas excursiones juntos.

Desde Alcalá, el nuevo Papa salió y su primer destino fue el de maestro de novicios de su provincia y, posteriormente fue el Provincial de los Jesuitas de Argentina. "Creo recordar que había entrado jesuita desde el seminario. Había estudiado ingeniero técnico químico, de ahí entró en el seminario y luego en el noviciado jesuita", ha precisado.

Asimismo, dice que el nuevo Papa era "muy aficionado al fútbol" y ha subrayado que sobresalía por su carácter espiritual y por una "honda espiritual" y por una "notable sencillez". "Era una persona muy firme en sus convicciones. Desde entonces no he vuelto a verlo", ha concluido.

Por otro lado, otros jesuitas han destacado que Bergoglio es un hombre de vida sencilla y muy austera y que cuando le ordenaron cardenal les dijo a los fieles de su diócesis que no se gastasen el dinero en el viaje, sino que lo destinaran a los pobres.

Como arzobispo, los jesuitas apuntan que ha estado "muy preocupado" por los jóvenes sacerdotes" y que siempre ha tenido un compromiso con la libertad ante las autoridades.

Finalmente, destacan su honda preocupación por lo espiritural, su capacidad de liderazgo así como su gran conocimiento de la vida religiosa y de la Iglesia. En cuanto al nombre elegido para su Pontificado, los jesuitas apuntan que "puede ser un guiño" a la vida religiosa por figuras como el franciscano San Francisco de Asís y los jesuitas San Francisco Javier y San Francisco de Borja.

La Compañía de Jesús cuenta con seis cardenales, aunque sólo dos de ellos eran electores. En este caso, sólo Bergoglio acudió al Conclave, ya que el otro, un cardenal indonesio no pudo asistir por motivos de salud.