¿Cómo sé si soy adicto al sexo?

MADRID, 28 Jun. (Consulta Doctor Carlos Chiclana) -

La adicción al sexo se lleva representando en el cine desde hace décadas. Podemos encontrar un ejemplo en la película 'Belle de Jour', del famoso director Luis Buñuel, una obra de arte desde el punto más cinematográfico de los años sesenta.

En dicha película, la protagonista abandona una vida matrimonial rutinaria y monótona por el mundo de la prostitución diurna. Esta nueva doble vida le permite la liberación de todas sus fantasías y deseos sexuales, algo que en un primer momento puede parecer estimulante y divertido.

Pero la adicción sexual no se trata de una elección. Cuando la conducta sexual de las personas deja de ser libre y pasa a ser incontrolable se convierte en un problema grave.

Algo que también se puede observar en la película 'Don Jon', donde el protagonista no puede dejar de ver pornografía ni cuando acaba de mantener relaciones sexuales con su pareja. En algunas escenas de la película se pone el foco en la valía social que consigue Jon gracias a sus múltiples encuentros con parejas sexuales de una sola noche. Este tipo de mensajes que ha ofrecido el séptimo arte, en ocasiones, ha minusvalorado el sufrimiento real de las personas que padecen este problema.

---Mi pareja es adicta al sexo, ¿qué hago?---

Un término con mayor aceptación dentro de la comunidad científica es el de Trastorno Hipersexual (THS). Una entidad que se caracteriza por un aumento en la frecuencia, cantidad e intensidad de la conducta sexual, que provoca un deterioro significativo en la vida de la persona a nivel laboral, familiar, social y/o personal.

La prevalencia de esta patología se encuentra entre un 1,4% y un 19% según los diferentes estudios, aunque parece ser que solo el 1% acude a terapia para poner solución al problema. Siendo mayor la problemática en hombres que en mujeres.

En un artículo publicado en la revista 'Archives of Sexual Behavior' en el año 2010, se pone de manifiesto la necesidad de contemplar el THS como una nueva realidad clínica, que debe ser incluida en los manuales para la clasificación de enfermedades mentales.

SEÑALES PARA SABER SI ERES ADICTO

De esta manera en la agenda de preparación del DSM 5, uno de los manuales diagnósticos por excelencia en el mundo de la psiquiatría y psicología, se incluyó un borrador con los posibles criterios diagnósticos de los que se deberían cumplir 4 o más:

1) Consume excesivo tiempo en fantasías e impulsos sexuales, planificando y participando en conductas sexuales.

2) Repetidamente desarrolla esas fantasías, impulsos y conductas sexuales como respuesta a estados de ánimo disfóricos (por ej.: ansiedad, depresión, aburrimiento, irritabilidad).

3) Repetidamente desarrolla fantasías, impulsos y conductas sexuales como respuesta a eventos estresantes de la vida.

4) Repetitivos e infructuosos esfuerzos por controlar o reducir significativamente esas fantasías, impulsos y conductas sexuales

5) Repite el comportamiento sexual sin tener en cuenta el riesgo de daño físico o emocional a sí mismo o a otros.

Estos criterios deben afectar de forma significativa a la vida personal, social u ocupacional de la persona y no ser debidos efectos secundarios de drogas, medicaciones o episodios maniacos.

Y, ¿A QUÉ SE DEBE?

El trastorno hipersexual puede tener diferentes etiologías:

1) Una afectación o patología médica, como puede ser el Parkinson, Alzheimer o algún tipo de enfermedad neurodegenerativa que pueda afectar a los centros cerebrales que regulan la conducta.

2) Una patología psiquiátrica en relación con el descontrol de los impulsos como el TDAH o el trastorno límite de personalidad, o con otros síntomas como la depresión o la ansiedad..

3) Una sintomatología con raíz más obsesiva, en la que la conducta sexual es utilizada como una compulsión para aliviar ansiedad.

4) Una conducta de carácter adictiva similar a la adicción a otras sustancias.

5) Un aprendizaje erróneo que ha llevado a hábitos disfuncionales en el plano de la sexualidad.

Este diferente origen de los problemas es aún un foco de investigación y estudio, para encontrar mejores modos de tratarlo y ayudar a las personas que lo solicitan.

Son diversas las publicaciones que hablan sobre las alteraciones a nivel neuronal que esta patología produce, un ejemplo es el artículo publicado en CNS Spectrums, que el THS afecta a diferentes estructuras cerebrales alterando la capacidad para controlar la conducta sexual y los sistemas de recompensa, produciendo alteraciones similares a la adicción a otras sustancias.

Además, una publicación de la revista The Lancet pone de manifiesto las alteraciones producidas en el sistema límbico y la amígdala en personas con una conducta sexual fuera de control.

ESTUDIO EN PROFUNDIDAD

Para poder conocer en profundidad esta patología y ofrecer la mejor ayuda posible a las personas que la sufren, desde la Consulta del Dr. Carlos Chiclana se va a realizar un estudio neuropsicológico para estudiar lo mencionado anteriormente.

Además, el objetivo de este estudio será el de definir con mayor exactitud estas áreas y localizar los centros neuronales encargados del control de la conducta sexual y las dificultades que aparecen cuando hay un comportamiento patológico, para poder ofrecer así una nueva posible línea de tratamiento.

Para poder realizar esta investigación es necesario contar con participantes que cumplan los criterios ya mencionados y que tengan entre 45 y 75 años. Toda participación será gratuita, de forma completamente anónima y los datos serán utilizados de forma confidencial y con fines exclusivamente científicos.

Si consideras que cumples las características mencionadas anteriormente, necesitamos tu ayuda. Para poder participar en el estudio se pueden poner en contacto con Alejandro Villena, psicólogo perteneciente a la Unidad de Sexología Clínica y Salud Sexual de la Consulta del Dr. Carlos Chiclana al siguiente correo electrónico: alejandrovillena@doctorcarloschiclana.com o llamando al número de teléfono 915 34 05 74.

Si quieres recibir asistencia psicológica, puedes contactar con nosotros en la siguiente direccción: contactar@doctorcarloschiclana.com

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